"Desde anoche y hasta esta mañana hubo bombardeos rusos más intensos que de costumbre contra bastiones rebeldes, sobre todo en la Ghuta oriental, al este de Damasco, en el norte de la provincia de Homs (centro) y en el oeste de la provincia de Alepo (norte)", afirmó a la AFP Rami Abdel Rahman, director de la oenegé.
Estos ataques aéreos mataron por la noche a ocho personas de una familia, entre ellas tres niños, en la localidad de Qibtan al Jabal, controlada por rebeldes no yihadistas en la provincia de Alepo (norte).
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El acuerdo de tregua ruso-estadounidense es parcial: implica al régimen y a los insurgentes, pero excluye a los grupos yihadistas Estado Islámico y Frente al Nosra (brazo sirio de Al Qaida).
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"Hubo al menos 25 bombardeos rusos contra la Ghuta oriental", uno de los bastiones de la insurgencia más importantes bajo control de varios grupos, entre ellos Jaish al Islam (islamistas sirios), añadió Abdel Rahman.
"Es más intenso que de costumbre", dijo. "Es como si quisieran someter a los rebeldes en estas regiones o anotarse tantos antes de la tregua", que debe comenzar a la medianoche hora local (22h00 GMT del viernes).
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Rusia bombardeó también otras ciudades, como Daret Ezza, al oeste de Alepo, o Talbise, en la provincia de Homs. En esas regiones, al igual que en la Ghuta, el Frente al Nosra está en minoría respecto a los rebeldes "moderados".
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La aplicación del cese de las hostilidades se espera que sea complicada, dado que Al Nosra y los rebeldes islamistas y no islamistas están aliados en varias regiones.
"Los territorios son muy mixtos, sobre todo en las provincias de Idleb y Alepo. Va a ser muy difícil", explica Rami Abdel Rahman.