En el municipio de Barbosa, Santander, hay polémica por un multitudinario sepelio en el que se habrían violado todas las medidas de seguridad a nivel nacional por cuenta del coronavirus.
El fallecido fue identificado como Orlando Molina, un reconocido comerciante de la comunidad a quien cientosde personas le dieron el último adiós. La aglomeración de personas motivó la reacción de algunas autoridades municipales.
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“La ley es para todo el mundo, la ley hay que cumplirla. Como alcalde de Barbosa debo controlar y ejercer que se cumplan los decretos, obviamente de la mano de la fuerza pública”, dijo Víctor Camacho, primer mandatario de Barbosa.
“He impartido las órdenes para que estos hechos no se vuelvan a presentar en el municipio”, agregó el alcalde.
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El mandatario local hizo la salvedad de “la ley para todos” porque el entierro que se hizo corresponde al papá de un funcionario público y en ese sentido aclaró que no hay excepciones en la norma, teniendo en cuenta la gravedad de la pandemia que se vive en este momento.
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trabajo del señor que perdió la vida, lugar de donde el féretro fue sacado para llevarlo al cementerio municipal.
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A su vez, hubo rechazo porque en el entierro se hizo una presentación musical en medio de la misa que se realizó antes de sepultar a Molina.
Este hecho generó la reacción de rechazo en redes sociales de parte de varias personas que mostraron su indignación ante este tipo de prácticas que no están permitidas ya que se puede generar un contagio masivo de COVID-19, sobre todo por personas asintomáticas.