Las afirmaciones y comparaciones del presidente Gustavo Petro provocaron la reacción del Gobierno de Israel, que anunció el fin de semana que suspenderá las exportaciones de seguridad a Colombia , una situación que, además, amenaza con poner en jaque las relaciones del país pues, incluso, el canciller Álvaro Leyva, tras su respaldo al jefe de Estado,instó al embajador Gali Dagan a irse.
¿Qué consecuencias podría tener “suspender” relaciones con Israel?
En diálogo con Mañanas Blu, con Néstor Morales, el analista e investigador en defensa y seguridad Erich Saumeth aclaró que, primero, lo que hay que determinar es si dicha suspensión de la que se habla “tiene efectos inmediatos o se van a respetar los contratos firmados” y es que, según explicó, las relaciones en materia de seguridad que han tenido ambos países ya llevan alrededor de 30 años.
“Porque lo que está por determinar es si la suspensión tiene efectos inmediatos, es decir, a partir de la fecha o se van a respetar los contratos firmados y no se va a realizar un nuevo contrato o firmar un nuevo convenio de aquí hacia el futuro”, recalcó.
Sobre los repuestos para los aviones, materiales usados por el Ejército colombiano y en general por la fuerza armada, como fusiles Galil, radios de comunicación y que son traídos desde otros países, como Israel, Saumeth mencionó que ya están los contratos firmados con los representantes de las compañías, pero, ahí, es cuando entran las dudas.
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Cabe recordar que en una de sus publicaciones en la red social X, el presidente Petro sostuvo “que si hay que suspender relaciones exteriores con Israel, se suspenden”. Posición que, una vez más, generó toda una polémica y reacciones de varios sectores por las implicaciones que esto podría tener, pues Israel es uno de los principales proveedores de armamento para Colombia.
En ese sentido, Erich Saumeth detalló que el 30 de diciembre de 2022 el Gobierno, en cabeza de Petro, firmó tres acuerdos de defensa con Israel. El primero, según recordó, para poder adquirir misiles de tierra y aire “con el fin de dotar de un sistema misilistico al sistema integral de defensa aérea nacional”.
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También, añadió, se acordó un sistema de artillería auto propulsada entre 12 y 18 unidades y, por último, un contrato para la compra de equipos de inteligencia electrónica para dotar algunos aviones. De acuerdo con el investigador Saumeth, solo estos tres acuerdos “representan una inversión de Colombia de aproximadamente 326 millones de dólares”.
Vea la entrevista completa en Mañanas Blu, con Néstor Morales:
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