Por falta de condiciones de seguridad, 43 docentes suspendieron sus clases en zona rural del municipio de Cáceres, en el Bajo Cauca antioqueño.
Son 22 veredas donde se encuentran sin clases a cerca de mil estudiantes de distintos grados en los poblados El Tigre, Bejuquillo, San Pablo, Vaquero, Peladero, Ponciano, entre otras.
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Según la Secretaría de Educación de Cáceres, los maestros aducen problemas de seguridad para cumplir sus funciones y aseguran estar en medio de atracos en las vías rurales, asesinatos e intimidaciones por parte de grupos armados.
"El señor alcalde y su equipo de trabajo tomaron la decisión de trasladar a los profesores hacia la zona urbana”, confirmó Alexandra Peláez, Secretaria de Educación de Antioquia.
“Son 43 docentes, hoy mil niños están afectados producto de esta situación. Por ahora no tenemos ningún docente amenazado, fue una medida decidida por ellos", aseguró la secretaria.
Incluso, según los maestros, un grupo armado prohibió la circulación de motos y vehículos de transporte público en la zona.
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Esta restricción aumentó el temor de los profesores, que en su mayoría viajan del casco urbano de Cáceres a cumplir la cita con sus alumnos.
"Nos hemos enterado de la difícil situación que viven los educadores de la zona rural de Cánceres”, relató Ómar Arango, Presidente de Adida, quien rechazó la situación de seguridad en el Bajo Cauca.
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“Se le ha pedido a las autoridades municipales para tomar medidas al caso y de esta manera , por ahora, los educadores esperan ejercer sus labores en zona urbana”, advirtió Arango.
Las autoridades locales en Cáceres, en cabeza del alcalde, ya realizaron un consejo de seguridad y le piden a la Fuerza Pública y el gobierno nacional garantizar el retorno de los maestros.
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