El Presidente Gustavo Petro participó este jueves 11 de julio en la sesión Peacebuilding Commission de las Naciones Unidas, en Nueva York, donde planteó un nuevo enfoque en la lucha mundial contra las drogas con una eventual legalización de la cocaína.
“El tema de la cocaína está determinando la mayor violencia en el mundo, que es la guerra contra las drogas desde hace medio siglo, y ha tenido a Colombia como el centro. Si mañana la comisión de Naciones Unidas sobre Drogas dijera: la cocaína es legal, mañana se acaba la guerra en Colombia. Así de simple. Como eso no será posible en mucho tiempo, la guerra en Colombia se mantiene”, manifestó el jefe de Estado.
El presidente Petro llevará ante el Consejo de Seguridad una propuesta para que "se dé un ajuste del plan marco de implementación que se diseñó para 15 años" porque con los rezagos hay que considerar muy seriamente la posibilidad de extender el periodo de implementación de ese plan marco.
En lo corrido de 2024, la lucha contra el narcotráfico en Colombia ha resultado en la incautación de más de 315 toneladas de clorhidrato de cocaína y 230 toneladas de marihuana. Asimismo, se han desmantelado 2.000 instalaciones de producción de drogas y se han capturado a más de 1.500 personas, presuntamente vinculadas con actividades ilícitas.
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El presidente Petro está en Nueva York para plantear ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas la ampliación del plazo de 15 años para la implementación en otros cinco u ocho años y propone medidas extraordinarias y de emergencia que permitan agilizar el proceso, en lo que el Gobierno ha llamado "un plan de choque" para "remover los obstáculos estructurales" que impiden la completa aplicación del acuerdo.
El informe de seguimiento ha sido elaborado en conjunto con antiguos integrantes de las Farc y miembros de varias entidades del Gobierno y hace énfasis en tres ejes: la reforma agraria, la transformación del territorio y el esclarecimiento de la verdad judicial completa.
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En mayo pasado, Petro llegó a anunciar que denunciaría ante el Consejo de Seguridad el presunto incumplimiento del acuerdo de paz por parte del Estado colombiano, posición que parece haber suavizado.