Colombia concretó un acuerdo con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) para realizar una investigación sobre los usos industriales de la hoja de coca. La iniciativa se trabajó durante una reunión entre la canciller, Laura Sarabia, y el director General del OIEA, Rafael Grossi.
El encuentro se dio en Austria, donde se desarrolla el 68 período de sesiones de la Comisión de Estupefacientes de Naciones Unidas.
"Esto permitirá abrir nuevas oportunidades para el desarrollo alternativo, incluyendo mejorar el rendimiento de agro insumos y biofertilizantes, así como evaluar las condiciones ambientales de los territorios que padecen impactos ambientales adversos por los problemas asociados a los cultivos ilícitos", explicó la canciller.
En este momento Colombia busca actualizar su marco regulatorio para el uso seguro y pacífico de tecnologías nucleares, en sectores como la salud, agricultura, industria, comercio y medioambiente.
"La jefe diplomática hizo un recorrido por el Organismo Internacional de Energía Atómica en Viena donde conoció sobre las aplicaciones de las tecnologías nucleares aplicadas a la hoja de coca a través de, por ejemplo, realizar mediciones para determinar que no haya presencia de alcaloides tóxicos en la harina de hoja de coca o fertilizantes derivados de la misma", señaló la Cancillería.