Según las afirmaciones de Nueva EPS , le han embargado más de $56.000 millones por parte de 15 Empresas Sociales del Estado, esto en Atlántico, Bolívar, Antioquía y Sucre. Según el comunicado, estos recursos han sido retenidos a través de una apropiación indebida, superando significativamente la deuda original que la EPS tenía con estos prestadores en el momento del proceso.
La magnitud de estos embargos han llevado a Nueva EPS a iniciar acciones legales y presentar demandas ante los organismos de control correspondientes. Esta retención ha afectado severamente la capacidad de la EPS para cumplir con sus obligaciones financieras a nivel nacional y ha comprometido la continuidad en la prestación de servicios de salud.
Julio Alberto Rincón, agente interventor de Nueva EPS, explicó que en 2022, cobros coactivos gestionados por abogados resultaron en que algunos hospitales recibieran sumas desproporcionadamente altas. Hospitales que debían recibir 500 millones de pesos terminaron cobrando 5.000 millones, lo que ha generado una deuda significativa para la EPS.
Rincón también señaló que la situación ha llevado al bloqueo de muchos hospitales para recibir nuevos pagos debido a estos embargos indebidos.
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“Este incidente subraya la urgencia de una revisión exhaustiva de los mecanismos de control y cobro en el sector salud, para prevenir que situaciones similares afecten el acceso de la población a servicios esenciales. Nueva EPS reafirma su compromiso con la salud de los colombianos y seguirá trabajando con determinación para resolver este percance, garantizando así la continuidad en la prestación de servicios de salud a nivel nacional", señala el comunicado.
Además, el caso fue remitido a la Fiscalía General de la Nación para que investigue cómo algunos hospitales públicos, se apropiaron indebidamente de fondos de la EPS.
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