Fragmentos, el monumento de la artista Doris Salcedo, hecho con toneladas de metal fundido producto de las armas que entregaron las Farc , fue el lugar en el que el presidente se encontró con la Iglesia y las víctimas.
No es un hecho menor que en medio del ambiente tan convulsionado por el que atraviesa Colombia, el lugar de encuentro entre el presidente Iván Duque con líderes religiosos y las víctimas del conflicto armado hubiera sido un monumento producto de la entrega de miles de armas de la entonces guerrilla de las Farc.
El mensaje, cuando los ojos del mundo están puestos sobre los hechos violentos que dejan más de 20 muertos y decenas de heridos en el país en 12 días de protestas, parece ser claro. Desde allí los líderes de las Iglesias no solo pidieron levantar los bloqueos, sino que rechazaron cualquier abuso por parte de la fuerza pública.
Publicidad
Además condenaron cualquier “incitación a la violencia, el odio, la discordia y la destrucción de la sociedad”, según un documento conjunto emitido tras la reunión.
Finalmente apoyaron un diálogo que pueda conjurar la crisis e insistieron en la necesidad de mantener los programas sociales para las personas en condición de vulnerabilidad.
Publicidad
La obra de la artista colombiana Doris Salcedo, que hoy fue sede de estos diálogos con los que el Gobierno busca unir al país, está compuesta por 1.300 láminas hechas con metal que cubren un piso de 800 metros cuadrados en un antiguo edificio del centro de Bogotá.
Nosotros destacamos la ardentía de los jóvenes y su clamor por participar en la toma de decisiones. Por eso, los invitamos a que construyamos juntos en los espacios de diálogo nacional y regional para hacer pactos por la educación gratuita, el empleo y su empoderamiento político. pic.twitter.com/5aNw7ccIBb
— Iván Duque 🇨🇴 (@IvanDuque) May 9, 2021