No han terminado las elecciones y ya tenemos el primer chicharrón del empalme: la subida de los precios de la gasolina.
Al comienzo de la pandemia, el Gobierno bajó los precios de los combustibles. Sin embargo, con la recuperación económica, los precios internacionales se dispararon, pero los que pagan los consumidores han subido mucho más lentamente.
Como resultado al primer trimestre del 2022, el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles tiene un faltante de 14.3 billones de pesos. El plan del Ministerio de Hacienda para poner esos recursos, o al menos la mayoría, incluye usar excedentes del presupuesto nacional y de Ecopetrol. Sin embargo, sin un aumento de precios el hueco seguirá creciendo.
“Se viene estructurando un borrador de decreto con una nueva metodología de fijación de precios y una senda de convergencia con incrementos graduales que se deberán implementar hasta cerrar los diferenciales”, dijo el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo.
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El funcionario aseguró que ese será un trabajo conjunto con el gobierno entrante y la idea es dejar publicado el borrador antes del 7 de agosto. Restrepo asegura que los incrementos deben comenzar una vez la inflación lo permita y negó que las elecciones sean la razón para haber mantenido bajos los precios.
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“De ninguna manera esta política responde, ni lo ha hecho, a un tema electoral”, concluyó.
El próximo lunes, el comité autónomo de la regla fiscal, que evalúa las cuentas del Gobierno, le hará un llamado de atención al Gobierno Nacional por el crecimiento de ese déficit del fondo de los combustibles.
El Gobierno aseguró que detrás de la decisión de mantener los precios está la preocupación por el incremento del costo de vida, es especial para los hogares más pobres.
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