En las últimas semanas, el presidente Gustavo Petro , se ha dedicado a cazar peleas, ha hecho algunas declaraciones que se le han vuelto en contra y que lo han enfrentado no solo con sus opositores sino también, por ejemplo, con una comunidad a la que acusó de estar vinculada a un grupo paramilitar.
El mandatario está embarcado esta semana en una gira por el Caribe y, ante las multitudes que acompañan sus eventos, ha pronunciado prolongados discursos que incluyen declaraciones que acaban en polémicas.
En las últimas horas arremetió contra la Federación Colombiana de Cafeteros, aseguró que “es el ejemplo del robo del café por parte de la oligarquía”, señalando que las grandes oligarquías habían arrebatado el negocio a los campesinos.
“La gran hacienda se creó en estas tierras fértiles planas que más deberían producir alimento, es más difícil en una montaña, los cafeteros a duras penas pudieron crear la economía campesina que fue una economía de la que todos vivimos durante casi por un siglo; cuando la oligarquía colombiana después de robarse el café, la Federación Colombiana de Cafeteros es el ejemplo del robo del café por parte de la oligarquía y luego se volvieron petroleros y carboneros y recibieron el CVY, (¿Cómo voy yo?), del petróleo, del carbón y la cocaína y acabaron con la economía cafetera que se desplazó hacia el sur”, dijo.
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En diálogo con Mañanas Blu, el Germán Bahamón, gerente de la Federación de Cafeteros, habló sobre cómo recibieron las declaraciones.
De acuerdo con Bahamón, el presidente Gustavo Petro se equivoca con sus palabras, defiende lo que ha hecho la federación entorno al desarrollo económico del país, destacando, que hay muchos cafeteros y trabajadores humildes.
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"La federación ha sido el ejemplo de que se pueden hacer las cosas distintas. Mancillar el nombre de la federación nos entristece y nos indigna", reiteró el gerente de la Federación de Cafeteros.
No es la única pelea de Petro
Las Farc y las disidencias
Por cuenta de un ataque a indígenas por miembros del Estado Mayor Central (EMC), la mayor disidencia de las antiguas Farc, el presidente suspendió esta semana en tres departamentos del suroeste del país el cese al fuego bilateral con ese grupo armado, con el que está negociando la paz.
Petro arremetió contra el jefe de ese grupo, alias 'Iván Mordisco', a quien acusó de ser "un 'traqueto' vestido de revolucionario".
Campesinos y paramilitares
Otra polémica ocurrió en el municipio de Tierralta, en el departamento caribeño de Córdoba, donde un grupo de campesinos bloqueó una de las vías de acceso por el incumplimiento de las autoridades en la construcción de una carretera.
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Esa región ha sido históricamente una de las más afectadas por la violencia paramilitar y allí opera el Clan del Golfo, la principal banda criminal del país también conocida como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC).
Escuche aquí la entrevista:
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