“Todas las acciones posteriores al accidente fueron desarrolladas por la menor de edad de 14 años”, Lesly Mucutuy . Así lo reveló el documento de la Dirección Técnica de Investigación de Accidentes de Colombia, en el que describen, a detalle, lo que realmente pasó luego de que la avioneta Cessna U206G cayera en la selva del Guaviare y en la que viajaba ella, su mamá, sus hermanos menores y el piloto.
El accidente ocurrió el 1 de mayo de 2023 y, luego de 39 días perdidos, los hermanos Mucutuy fueron rescatados por los equipos de búsqueda de las Fuerzas Militares. Durante ese tiempo, sobrevivieron solos, comiendo solo frutas de los árboles . Lesly, la mayor de todos, fue quien los guio, los cuidó y los mantuvo con vida, incluyendo al bebé que en ese momento tenía apenas 11 meses.
Según el informe, Lesly quedó inconsciente por el impacto de la avioneta, pero “una vez que se recuperó, escuchó el llanto de los otros tres menores” y los “asistió”. Cuando logró despertar y ver lo que había ocurrido, “notó que se encontraba sangrando en grandes cantidades como consecuencia de la herida abierta en la cabeza”.
“Para detener el sangrado y evitar que los insectos se posaran sobre la herida, improvisó un vendaje con algunas prendas de ropa que se encontraban al interior de la aeronave, y con la gasa que encontró en el kit de primeros auxilios de la aeronave”, describe el documento, el cual fue elaborado, en parte, gracias al relato detallado de Lesly.
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Añadió que el pie izquierdo le quedó aprisionado con el riel de la silla que ocupaba, la número cinco de la avioneta. En ese momento y ante el desespero por ayudar a sus hermanos, “la única forma como logró liberarlo fue retirando la pieza” del zapato que tenía.
Ahí, recordó, sacó al bebé, quien tenía signos de sofocamiento porque tenía el peso de todo el cuerpo de su mamá, quien estaba sobre él ya muerta. Según se conoció, esto permitió que él sobreviviera al accidente.
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Después, Lesly liberó de las sillas a sus otros dos hermanos, quienes estaban también ahí atrapados. Luego, “todos abandonaron la aeronave por la puerta posterior del costado derecho, que había sido abierta previamente”.
La investigación reveló que los cuatro menores permanecieron dos días y dos noches en el sitio del accidente, junto a la aeronave. “Durante este tiempo, y conforme a la entrevista, los menores se alimentaron con las frutas copoazú, que llevaban en su equipaje y consumieron el agua potable que encontraron” ahí mismo.
"Ella manifiesta que en el día 35 tuvo unos síntomas que hoy los especialistas, en su diagnóstico, afirman que fue una ataque de ansiedad por la angustia de no ser encontrados", contó en Blu Radio Miguel Camacho, director de Investigación de la Aerocivil.
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