Este viernes, hace 35 años, un grupo de guerrilleros delM-19 se tomó el Palacio de Justicia con el fin de hacerle un juicio al entonces presidente de la República Belisario Betancur por supuestos incumplimientos a los acuerdos de paz. A pesar de largos años de investigación, siguen sin responderse muchas preguntas, a los familiares de las víctimas y a la opinión pública.
La deuda eterna: los desaparecidos. Con el paso de los años, las autoridades han logrado identificar a 6 de los 11 desaparecidos del Palacio de Justicia, hechos por los que fue condenada la Nación, teniendo en cuenta que, cuatro de ellos, al parecer, salieron con vida del Palacio. Los familiares de Carlos Augusto Rodríguez Vera, David Suspes Celis, Gloria Stella Lizarazo Figueroa e Irma Franco Pineda, siguen esperando verdad y justicia en sus casos.
Jorge Franco, hermana de Irma Franco, recordó que en este caso no hubo un solo declarante que no haya manifestado que Irma salió viva del Palacio, detenida por el Ejército, que llegó a la Casa del Florero y de ahí, la última información que se tuvo es que la trasladaron en un jeep del Ejército.
Según dijo, eso conllevó a que todos los organismos judiciales condenaran a la Nación por los hechos. Sin embargo, a pesar de las múltiples investigaciones, no hay una sola condena contra el autor de la desaparición. Según Franco, el coronel Plazas Vega ya dijo que su hermana murió y que fue enterrada en un batallón del Ejército.
Publicidad
“Una persona manifiesta que en el Palacio de justicia no hubo desaparecidos sino un asesinato de Irma Franco que fue conducida a la brigada de inteligencia de Bogotá, que fue capturada por un capitán, un teniente y unos sargentos, cuando el comandante era el coronel Sánchez Rubiano, posteriormente, no sé, si se les murió o la mataron y fue enterrada en el sitio donde hacen tiro al blanco en ese batallón. Para sorpresa de ustedes la persona que hizo esa declaración fue el coronel Plazas Vega”, afirmó Franco Pineda.
Además, añadió que quisiera que los responsables de la toma y de la retoma fueran a la JEP a contar la verdad. “Que digan la verdad y la demuestren”, dijo.
Publicidad
Otras incógnitas sin esclarecer son: si se alteró la escena de los hechos y quién dio la orden de hacerlo. Sobre este tema, hablamos con Carlos Valdés, exdirector de Medicina Legal, quien vivió el holocausto cuando apenas era un estudiante de medicina y posteriormente, como director del instituto dio un impulso científico para avanzar en las investigaciones e identificar cuerpos carbonizados. Como lo revelamos hace un par de años, para Valdés, hubo errores en la entrega de los cuerpos a raíz de como los bomberos “lavaron” el Palacio, lo cual, terminó en una alteración en la escena del crimen.
“Alteración de la escena, sí, eso es lo que se sabe. Sin embargo, se conoce que cuerpos de personas que habían salido del Palacio vuelven y se encuentran al interior del Palacio incinerados y con evidencia de lesiones por proyectil de arma de fuego. La alteración de la escena deja de ser una teoría para convertirse en una realidad y ese es el punto que ofrece las mayores dificultades en la investigación forense porque desde ese momento, hasta la exhumación del cementerio del sur advertíamos esa gran mezcla de partes”, dijo Valdés.
Valdés recordó cómo manejaron la escena y recolectaron de los restos que quedaban en el Palacio de Justicia. Según su testimonio, el 8 de noviembre, los miembros de aseo de la época barrieron todos los restos, los echaron en unas bolsas plásticas negras y transparentes que llegaron al instituto, el cual, estaba “lleno de personal uniformado, de Policía, del Ejército, había personal no uniformado del F2, B2, porque eran policías no uniformados y, además, jueces penales militares”.
“En ese incendio se alcanzaron temperaturas bastante amplias, el bronce de las barandas quedó fundido, según los registros que quedaron. Pero además los cuerpos quedaron mezclados porque la mayoría de los cuerpos se encontraban en los baños que estaban en el 2,3 y 4 piso. El día 7 llegan los bomberos para apagar el fuego que quedaba y son ellos los que barren los cuerpos carbonizados, los cuales se fragmentan con mucha facilidad, es decir que el concepto de cadáver, en ese momento, no se daba. Con el agua a presión son barridos de los pisos 3 y 4 y caen al primer piso y se mezclan con todos los desechos que había dejado el enfrentamiento con unas escenas que eran más de una demolición porque se mezclaban con vidrios, tierra, entre otros, y entonces había una mezcla de una serie de elementos”, añadió Valdés.
Publicidad
La tercera incógnita es por qué el M19 hizo la toma del Palacio de Justicia y si realmente la toma la financió Pablo Escobar. Sobre el tema, el exguerrillero Diego Arias es enfático en manifestar que el entonces comandante del M-19, Álvaro Fayad, no tuvo ninguna relación con el narcotráfico, ni con Pablo Escobar.
Publicidad
La toma del Palacio de Justicia fue una decisión tomada por el mando del M-19, en ese momento de Álvaro Fayad Delgado, que buscaba llevar a juicio al presidente Belisario Betancur después de un proceso de paz muy mal planteado y después de sus incumplimientos y de tregua de cese al fuego.
Por eso, dice que no se puede desdibujar el sentido político de la toma al Palacio.
“No se hace ningún esfuerzo a la tarea pendiente de la verdad, del esclarecimiento y de la reconciliación cuando se le intenta despojar el hecho de su sentido político para vincularlo como un mandado del narcotráfico, particularmente, de Pablo Escobar. El M19 siempre mantuvo una relación muy distante con el narcotráfico. Si hubiera tenido los 3 millones de dólares de Pablo Escobar, como se menciona, hubiera resulto un tema militar crucial que es lo que precipita el fracaso de la operación y es la imposibilidad de neutralizar el ingreso de las tanquetas y el M19 ingresó a esa acción militar sin esas armas”, dijo.
“El tercer elemento es de lógica, a nadie se le ocurre que puedan quemarse unos expedientes siendo que, aún en un momento donde no había digitalización, esos expedientes podían recuperarse a partir de copias que reposaban en otros despachos judiciales. Además de que nunca ha aparecido la prueba reina, el cheque, la consignación, el testimonio, si queremos avanzar en la verdad y el esclarecimiento vale la pena que se rectifique de parte de quienes insisten de que el M19 hizo fue un encargo para el narcotráfico porque no corresponde con lo que fue el sentido por el que el M19 tomo la decisión lamentable y trágica de la toma del Palacio”, concluyó Arias.
Publicidad
Una pregunta infaltable año a año y es ¿quiénes son responsables de las torturas y asesinatos fuera de combate? Por eso, René Guarín, que esperó 30 años para enterrar los restos de su hermana Cristina Guarín, dice que el hallazgo de los restos de algunos de los desaparecidos no ha contribuido a sanar la vida.
“No ha contribuido a sanar la herida porque la Fiscalía cada vez que entrega restos de personas desaparecidas promete hacer investigaciones, pero nunca ocurre. La Fiscalía ha terminado siendo una oficina de fragmentos óseos, no se conoce la verdad de lo que pasó. Al parecer, el pacto institucional de silencio sigue vigente porque la verdad de lo que ocurrió no la conocemos. El estado colombiano tiene una deuda con las víctimas y con el país sobre: con los desaparecidos, torturados, ejecuciones extrajudiciales”, sentenció.
Publicidad
Otro de los puntos que sigue sin concluir es que la Fiscalía termine de vincular a los presuntos responsables de torturas y entonces, resolverles la situación jurídica. Sin embargo, esto se mantiene en suspenso porque la JEP no ha definido si asumirá o no el caso de los militares que se han presentado a esa jurisdicción.