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La iniciativa que ha beneficiado a más de 370 mil personas vulnerables en el país

El programa de ayuda humanitaria ofrece transferencias monetarias y capacitación para mejorar la calidad de vida y fomentar la autosuficiencia de miles de migrantes y colombianos vulnerables.

La iniciativa que ha beneficiado a más de 370 mil personas vulnerables en el país.
Ha beneficiado a migrantes venezolanos y colombianos vulnerables.
Suministrada

El programa humanitario ADN Dignidad ha estado cambiando la vida de más de 370 mil personas en Colombia, incluyendo migrantes venezolanos y colombianos en situación vulnerable. Este proyecto, liderado por Acción contra el Hambre junto a organizaciones como el Consejo Danés para Refugiados y el Consejo Noruego para Refugiados, ha tenido un impacto positivo desde su inicio en 2019.

Un reciente estudio realizado por la consultora internacional 3ie reveló que las personas que recibieron ayuda económica del programa no solo han logrado mejorar sus ingresos y alimentación, sino que también han experimentado cambios duraderos en su bienestar general, incluso 18 meses después de haber recibido la ayuda.

¿En qué consiste el programa ADN Dignidad?

Este programa ofrece transferencias monetarias no condicionadas durante seis meses, es decir, las familias reciben dinero para gastar según sus necesidades, ya sea en alimentos, salud o cualquier otra prioridad.

Además, el programa incluye asesoría sobre alimentación saludable, manejo del dinero y ayuda para regularizar la situación migratoria de quienes lo necesitan.

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El estudio de impacto mostró que los beneficiarios del programa han reducido en un 25% el uso de estrategias de supervivencia, como comer menos para que la comida rinda más o comprar alimentos de baja calidad. Incluso después de más de un año de haber recibido la ayuda, estos cambios positivos se han mantenido, con una reducción del 13% en estas prácticas.

Además, los beneficiarios han aumentado sus ingresos en un 14% y han logrado trabajar más horas por semana, lo que les ha permitido depender menos de remesas y, en muchos casos, empezar a enviar dinero a sus familiares, mostrando una mayor independencia financiera.

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Otro aspecto relevante es que las personas que participaron en el programa reportan sentirse más seguras, con una disminución del 37% en la percepción de violencia e inseguridad en su entorno. A largo plazo, su satisfacción con la vida ha mejorado en un 4,6%, según el estudio.

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