JEP alerta por recrudecimiento de la violencia en Cauca y Valle del Cauca

La Justicia Especial para la Paz, JEP, le llamó la atención al Gobierno nacional y a las gobernaciones de Valle del Cauca y Cauca por el deterioro de la seguridad y en recrudecimiento de la violencia en ambos departamentos.

Según la jurisdicción, es evidente que los hechos en la región han incrementado en los últimos meses por la presencia de varios grupos ilegales.

Los hechos registrados en esta región reflejan la grave crisis de orden público que ha incrementado en los últimos meses debido a la presencia de múltiples actores armados en algunas zonas.

“Este contexto prende las alarmas sobre las afectaciones en los territorios priorizados en la investigación del caso 05, exponiendo a los colectivos étnicos y sus representantes judiciales a un riesgo extraordinario que pone en peligro la vida, la integridad, la libertad y la autonomía de cientos de miles de indígenas y afrocolombianos”, detalló la JEP.

La preocupación hoy está sobre 17 municipios: Santander de Quilichao, Suárez, Buenos Aires, Morales, Caloto, Corinto, Toribío, Caldono, Jambaló, Miranda, Padilla y Puerto Tejada en Cauca; y Palmira, Pradera, Florida, Candelaria y Jamundí, en el sur del Valle del Cauca.

Allí ya había ordenado medidas cautelares para proteger a las víctimas y garantizar su acceso a la justicia y procesos de reparación, por ello es que citó a diversas entidades del Estado para que respondan por las tareas que han implementado.

Fueron convocados los ministerios del Interior, Defensa, Ambiente, Salud y Agricultura, la UNP, Senaq, ICBF, Departamento Nacional de Planeación, Defensoría del Pueblo, la oficina del Alto Comisionado para la Paz y las gobernaciones del Cauca y del Valle del Cauca .

La audiencia pública será el 10 y 11 de septiembre en Popayán, donde las entidades deberán explicar qué están haciendo para mitigar los hechos de violencia.

“La situación de inseguridad que afecta al norte del Cauca y sur del Valle del Cauca exige acciones contundentes que permitan reducir, o en su defecto, minimizar el riesgo al que se enfrentan constantemente tanto el pueblo indígena como el pueblo negro y afrocolombiano”, puntualizó la JEP.

Este llamado de atención llega en medio de la nueva minga indígena que se está concentrando en Bogotá con miles de indígenas que han llegado desde el Cauca para pedir un espacio de diálogo con el Gobierno nacional.