Con solo 20 días al mando del país, el Gobierno del presidente Gustavo Petro ya tuvo que prender las alarmas por varios hechos de orden público, la mayoría liderados por indígenas, por ejemplo, la toma de predios privados como reclamo a sus derechos y bloqueo de vías, entre otros.
El detonante de esta situación fue la toma en Dagua, en el departamento del Valle del Cauca, de la Hacienda Caballo Loco. Allí, desde la semana del 22 de agosto, al menos 200 personas invadieron el predio donde hasta esa fecha funcionaba un albergue para animales de la Fundación Paz Animal. Quienes tomaron este terreno por la fuerza aseguraron que, por ser un lote a cargo de la Sociedad de Activos Especiales, les correspondía.
Por otro lado, el domingo 21 de agosto al menos 150 personas invadieron una finca ganadera y palmera ubicada en el municipio de Curumaní, en el departamento del Cesar y ahí se empezó a expandir esta problemática.
Algo similar, pero en mayores proporciones, pasó en el Cauca, en donde se han denunciado invasiones de tierras por parte de los indígenas en fincas privadas productoras de caña en los municipios de Caloto, Guachené y Miranda, bajo la idea de que son terrenos que les han usurpado los azucareros durante décadas.
Publicidad
El tema de la pertenencia ancestral o colonial aún es un asunto que el Gobierno de Gustavo Petro tiene por resolver.
Todas las personas que ocuparon estos predios basan sus acciones en el discurso que el presidente Petro pronunció el 7 de agosto, día de su posesión, en el que aseguró que todos los bienes en extinción de dominio de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) pasarían a ser la base de una nueva economía productiva, administrada por las organizaciones campesinas.
Publicidad
“Por eso, a partir de hoy todos los bienes en extinción de dominio extinguidos de la SAE pasarán a ser la base de una nueva economía productiva administrada por las organizaciones campesinas, por las cooperativas urbanas de jóvenes productivos y por asociaciones populares femeninas”, aseguró Petro en su primer discurso como presidente de Colombia.
Finalmente, según la Sociedad de Activos Especiales, los activos rurales representan 450.000 hectáreas, que alcanzan un valor 1,8 billones de pesos.
Publicidad
Publicidad