El presidente de la República, Gustavo Petro, se pronunció este domingo, 11 de febrero, tras los graves hechos de orden público que se registraron en la noche del sábado 10 en Tuluá (Valle del Cauca ), en el que un agente de tránsito fue asesinado y otro herido, además de la quema de vehículos y motocicletas.
Estos hechos, según indicaron autoridades locales, se registraron en aparente represalia por la captura de Mauricio Marín Silva, alias 'Nacho', quien es señalado de ser el jefe criminal de la banda La Inmaculada, aparte otros delincuentes que delinquían en este municipio de 221.000 habitantes.
“La banda la inmaculada ha retado a la sociedad. Sus jefes están presos. No aceptamos el chantaje”, comentó Petro en su perfil de X, además de ordenar la militarización de esta población, para evitar que se sigan registrando más alteraciones en sus calles.
Y es que las imágenes que circularon en las redes sociales dan cuenta del horror que se vivió en las principales calles de esta localidad del corazón del departamento, en la que al menos cinco carros y dos motos fueron incineradas.
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En lo que respecta al asesinato del agente de tránsito, el mismo se produjo producto de un ataque sicarial que habría sido ordenado por esta estructura criminal que manda en esta zona del país y que amenazó de muerte al alcalde Gustavo Adolfo Vélez, considerado el mandatario más amenazado de Colombia.
Militarizan Tuluá, Valle, tras alteraciones al orden público
La ciudad de Tuluá enfrenta una situación de emergencia
y tensión tras una serie de hechos violentos que han sacudido la tranquilidad de la comunidad. Dos atentados sicariales contra agentes de tránsito, la quema de varios vehículos y motocicletas, así como disturbios en distintos sectores, han llevado a la gobernadora del Valle, Dilian Francisco Toro
, a tomar medidas drásticas para restablecer el orden.
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Por los hechos, la gobernadora anunció a través de sus redes sociales la decisión de militarizar Tuluá en colaboración con el alcalde Gustavo Vélez, la Policía del Valle y el Ejército.
La escalada de violencia incluyó dos atentados sicariales contra agentes de tránsito, resultando en la trágica muerte de uno de ellos, mientras que el otro lucha por su vida en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un hospital local.
Adicionalmente, se registraron actos vandálicos que incluyeron la quema de al menos cinco vehículos tipo taxi y varias motocicletas en diferentes zonas de la ciudad, incluyendo la zona céntrica y el callejón conocido como “Mate”. Estos incidentes han generado temor y preocupación entre los residentes de Tuluá.
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