Tras la oleada de atentados en el oleoducto Caño Limón-Coveñas, la fiscal fue enfática al asegurar: “Independientemente de lo que esté sucediendo en los diálogos y negociaciones que lleva a cabo el Gobierno Nacional, entre otros actores armados y el ELN, las investigaciones no se suspenden. Claro que abrimos investigación; estos atentados no solo se están enfocando desde el punto de vista del terrorismo, sino que también implican algo muy grave: los delitos ambientales”.
Dos atentados han ocurrido en la región de Arauca, Colombia, en un lapso de pocos días. El primero tuvo lugar el 26 de agosto en la vereda La Pava, en Saravena, mientras que el segundo se registró el 29 de agosto en la vía que conecta el municipio de El Carmen con el departamento de Cesar.
Por otro lado, el coronel Leonardo Ferreira aseguró que la fuerza pública ya ha comenzado a movilizar tropas para garantizar la seguridad en la zona y controlar la amenaza tanto para la comunidad como para el medio ambiente.
Finalmente, desde la finalización del cese al fuego entre el Gobierno y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), la región de Arauca ha experimentado una serie de ataques contra la infraestructura petrolera, con un total de seis atentados contra oleoductos en el departamento, situación que ha generado inestabilidad y preocupación entre las autoridades y la población local.
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