Las Fuerzas Militares recuperaron a dos menores de edad, un niño de 16 años y una niña de 13 años, que fueron reclutados de manera forzada por el ELN. Los dos menores, según indican las autoridades, habían sido obligados a usar prendas de uso privativo de la fuerza pública, a recibir entrenamiento guerrillero y a disparar y atacar a las tropas.
“Este hecho es una clara infracción a las leyes colombianas, así como a los convenios y tratados internacionales que prohíben reclutar y emplear a niños, niñas, jóvenes y adolescentes en acciones criminales. Además, este hecho es tipificado por la ley nacional e internacional como un crimen de guerra”, indicaron las Fuerzas Militares .
La recuperación de los menores se dio en medio de un allanamiento contra la extorsión, del cual venían siendo víctimas comerciantes, transportadores, ganaderos y empresarios de esta zona limítrofe con Casanare. En medio de la operación, las autoridades incautaron fusiles, munición, material de intendencia y documentación del grupo armado organizado.
Las Fuerzas Militares sostuvieron un combate contra una estructura, al parecer, perteneciente al ELN en zona rural de Labranzagrande, Boyacá. Al llegar al sitio, los delincuentes atacaron a las tropas, lo que provocó el combate.
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Los delincuentes, al verse superados por las FF.MM., decidieron huir, no sin antes dejar abandonados al niño y la niña, que habían sido reclutados de manera forzada y obligados a disparar y atacar a los miembros de la fuerza pública. De inmediato, los niños fueron llevados bajo todos los protocolos de seguridad dispuestos para atender esta clase de situaciones.
Los dos menores recuperados fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para el respectivo restablecimiento de sus derechos. Asimismo, las autoridades investigan su lugar de origen y el tiempo que llevaban en la estructura.
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“Este proceder es una clara violación al artículo 162 del Código Penal Colombiano, que prohíbe reclutar o alistar a niños menores de 15 años en las fuerzas armadas o utilizarlos para participar activamente en las hostilidades, y tipifica este delito como crimen de guerra”, indicó el coronel Carlos Realpe, comandante de la Décima Sexta Brigada del Ejército.