El 24 de septiembre de 2024, seis jóvenes colombianas desaparecieron en Veracruz, México, luego de haber viajado con la promesa de empleo. Las mujeres, identificadas como Derlis Dayana Paneso Taborda, Yarlin Giraldo Soto, Michell Daniela Morales Quiroga, Marianyeli Michell Chacón Álvarez, Sofía Velázquez Giraldo y Layma Argenis Parra Cerquera, llegaron al municipio de Boca del Río, pero desde ese momento sus familias perdieron contacto con ellas.
Según versiones de los familiares,las jóvenes fueron engañados por supuestos casos que les robaron sus pasaportes y les exigieron dinero para cubrir los gastos de traslado. Esta situación fue confirmada por declaraciones recopiladas por el periodista Óscar Andrés Henao Velásquez, quien destacó el clamor de ayuda por parte de las familias.
Las jóvenes habían informado a sus allegados que un chófer las llevaría a una fiesta en Boca del Río, pero poco después recibieron una llamada de una mujer identificada como Yesica Anahí Ramírez, alias "Lilith", quien exigió 100.000 dólares como rescate, afirmando que estaban secuestradas, según el medio La Silla Rota.
El Colectivo Justicia y Dignidad Veracruz, conformado por familiares de personas desaparecidas, ha difundido fichas con las fotos y datos de cinco de las jóvenes, buscando mayor visibilidad para el caso. Sin embargo, hasta el momento, la Comisión Estatal de Búsqueda no ha emitido fichas oficiales, lo que mantiene a los familiares en una angustiosa incertidumbre.
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Así avanza la investigación
La desaparición de las colombianas ha tenido gran difusión en redes sociales, y varios medios reportaron que los familiares han intentado obtener ayuda de las autoridades tanto en Colombia como en México, sin lograr una respuesta efectiva. Incluso, se perdió contacto con una amiga de las jóvenes en México, quien también intentaba ayudarlas, lo que ha agravado la situación.
Este caso refleja la creciente preocupación sobre la inseguridad en México y la falta de protección para ciudadanos extranjeros que enfrentan riesgos de explotación y secuestro. Las familias continúan pidiendo ayuda urgente, mientras las autoridades aún no logran avances significativos en la búsqueda de las jóvenes desaparecidas.
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Este tipo de tragedias subraya la necesidad de una mayor cooperación internacional y la implementación de medidas preventivas para proteger a las personas que buscan oportunidades laborales en el extranjero, evitando que se repitan tragedias como esta.
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