Tras 6 años en el exterior, Betancourt regresó a Colombia este 3 de mayo para asistir a un foro sobre paz y reconciliación. Además, la exdirigente política aprovechará su visita para cumplir una serie de citas, como hablar con sus excompañeros de cautiverio, incluida Clara Rojas.
Íngrid se refirió al largo tiempo en que permaneció fuera de Colombia, asegurando que “fueron años de reconstrucción, de volver a centrarme en la vida. De volver a construir la relación con los niños, la familia… volver a ser persona”.
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Respecto a este tema, la reconstrucción de la vida después de sufrir en primera persona los vejámenes del conflicto armado en Colombia, indicó que “hay que tener mucha humildad, saber que es de a poquitos. Uno todos los días descubre qué tan profundo es el daño (…) hay que comenzar a limpiar el sótano, mi prioridad era volver a ser mamá”.
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Finalmente, respecto al proceso de perdón a sus captores, indicó que no olvida, pero “el perdón es un largo camino que quiero abrazar al otro”, incluyendo al que la secuestró y humilló, pues “el odio no es más grande que el amor por Colombia”.