Durante la entrega de tierras a víctimas del conflicto armado en El Salado , Montes de María, el presidente Gustavo Petro arremetió contra el Grupo Argos, el periódico El Colombiano y el Grupo Empresarial Antioqueño.
“Entonces la gran empresa privada, amiga del presidente de la República en ese entonces, Argos, ¿de quién es Argos?, del mismo dueño de El Colombiano creo yo, periódico del grupo empresarial antioqueño”, indicó.
Quizá la reclamación más grande contra Argos está en Montes de María, donde fue el discurso de Petro anoche. Argos compró esas tierras a través de Tekia, una filial para un proyecto de la siembra de teca, un árbol maderable y para cementeras.
“Estas tierras fueron ocupadas por un gran capital que se denomina Argos, se quedó con la tierra de los desplazados. No voy a acusarlos de la masacre, no sabemos de eso, pero se quedó beneficiaría del fruto de la masacre y de la sangre; se quedó con las tierras de los campesinos”, manifestó Petro.
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Esta reclamación de tierras, de los campesinos a Argos, la lideró y los representó Gerardo Vega, actual director de la Agencia de Restitución de Tierras y en ese entonces director de la ONG Forjando Futuros, así como Jhenifer Mojica, hoy ministra de Agricultura y quien trabajó con los campesinos en la Unidad de Tierras cuando era directora de asuntos étnicos.
Los procesos de restitución en contra de Argos
El caso 79 de la Comisión de la Verdad recoge las 17 sentencias de restitución de tierras que entre 2016 y 2021 hay contra Argos, por predios reclamados por campesinos en El Carmen de Bolívar, San Jacinto (Bolívar), San Onofre, Ovejas (Sucre) y San José de Becerril (Cesar).
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“La Fundación Forjando Futuros ha registrado en el informe Empresas, violencia, despojo y concentración de tierras, un total de 66 empresas cobijadas por sentencias de restitución (a corte mayo de 2020), en las que no sólo ordenan restituir predios, sino también suspender títulos mineros y/o anular hipotecas bancarias, ranking que de lejos encabeza CEMENTOS ARGOS S.A. En efecto, magistrados de restitución de tierras de cinco tribunales diferentes han proferido (hasta hoy) 16 sentencias en contra de CEMENTOS ARGOS S.A., referidas a predios localizados en El Carmen de Bolívar, San Jacinto, Ovejas y San Onofre. En total, le han ordenado a la cementera que restituya 1.224,8 hectáreas a familias campesinas de los Montes de María, repartidas en una treintena de predios”, dice el documento.
Además indica: “Sin embargo, el asunto es más complejo de lo que parece. Las sentencias revelan una refinada estrategia de ARGOS para despistar y encubrir sus movidas económicas, jurídicas y políticas para acumular tierras, previa adquisición de las mismas a precios relativamente bajos y sin negociar directamente con campesinos. Con base en ello, ARGOS ha venido alegando su buena fe exenta de culpa en los escenarios judiciales, arguyendo también –en tono moralista– que no se opondría a la entrega de predios si se demostrare que los dueños originales fueron despojados por aquellos de quienes adquirió u otras personas”.
Según recoge la Comisión de la Verdad: “El objetivo de ARGOS era ambicioso: adquirir tierras de alta calidad, a bajo costo, con localización óptima y acceso a redes de servicios para desarrollar proyectos agroforestales a gran escala. Para lograrlo, estimularon una red de aliados estratégicos (terceros inversionistas) que adquirieron los predios en los Montes de María y los negociaron con la compañía para no hacerlo directamente con campesinos parceleros”.
Y añade: “Luego se contrataba a una fiduciaria que ayudaba a constituir un patrimonio autónomo con los predios adquiridos, en favor de la propia ARGOS. Se trataba de un fideicomiso sui generis, pues la compañía decidía qué predios se compraban (encargándose del estudio de títulos y exonerando de responsabilidad a la fiduciaria), y no delegaba la administración del patrimonio autónomo, sino apenas la formalización de la compra a nombre de la fiduciaria”.
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Puntualiza el aparte del informe de la Comisión de la Verdad: “Es decir, ARGOS “delegaba” la titularidad de los predios en la fiduciaria, pero pactaba que los derechos de propiedad revertirían a su haber a la extinción del patrimonio autónomo”.
ARGOS desarrollaba el proyecto agroforestal con el apoyo del Gobierno nacional y la cooperación internacional, en el marco de las políticas públicas ambientales de incentivos forestales.