El gerente de Fronteras de la Presidencia de la República, Lucas Gómez, en diálogo con BLU Radio dijo que la expulsión no es la solución para resolver los casos de venezolanos que delinquen en Colombia.
Para el funcionario, el país comparte más de 2.000 kilómetros de frontera con Venezuela, lo que hace imposible controlar el regreso de quienes delinquen.
“Tenemos una frontera de más de 2.200 kilómetros con Venezuela. Por eso la deportación no es la receta mágica para resolver el problema”, enfatizó.
Añadió que se debe avanzar en la individualización de los responsables de delitos y judicializarlos, algo en lo que contribuirá el Estatuto Temporal de Protección.
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“A es ínfima minoría de delincuentes de nacionalidad venezolana tenemos que atacarlos con todo el peso de la ley y más que expulsarlos, judicializarlos en nuestro país”, puntualizó.
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El funcionario manifestó que también hay que pensar en los venezolanos de bien que hoy se sienten estigmatizados por su nacionalidad.
“Aquí hemos hecho el proceso de expulsar a delincuentes, pero tenemos una frontera porosa. Ellos llegan a un país en donde hay toda la impunidad posible y tienen todas las posibilidades de revolverse”, dijo.
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Escuche la entrevista completa en Mañanas BLU:
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