
El ministro de Defensa, Iván Velásquez , aseguró que la inseguridad en el país no es tan dramática como algunos sectores la presentan. Por el contrario, la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, considera que la situación de inseguridad en su territorio es grave y requiere medidas urgentes.
Toro, quien ha sido una de las voces más críticas en relación con la política de seguridad, señaló que desde su llegada al cargo ha insistido en la necesidad de diseñar una estrategia urgente para enfrentar la violencia.
“Desde que llegué he dicho que tenemos que hacer una estrategia conjunta porque las dificultades de inseguridad que tenemos en estos departamentos es mucha”, afirmó la gobernadora. Su postura es clara: la situación de violencia y criminalidad en el Valle del Cauca no puede ser minimizada, y requiere acciones inmediatas y más específicas.
Por su parte, la ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, señaló que el incremento de la violencia fue precisamente lo que llevó al Gobierno a decretar el estado de conmoción interior en varias regiones del país. Según Buitrago, esta medida refleja la gravedad de la crisis de seguridad y la necesidad de un enfoque más contundente en el combate a la violencia. “El tema de seguridad en diferentes departamentos llevó al Estado de Conmoción Interior (…) significa entender que hay una violencia que ha escalado”, explicó.
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Las palabras de Velásquez han sido interpretadas como una subestimación de los problemas de seguridad en muchas regiones del país, lo que ha generado malestar en varios sectores políticos y gubernamentales, que insisten en que la situación es mucho más crítica de lo que el ministro de Defensa ha señalado. El debate sobre la seguridad sigue siendo uno de los puntos más sensibles en la agenda política del país, y las autoridades locales, como la gobernadora Toro, continúan reclamando un enfoque más directo y efectivo para frenar la violencia que afecta a tantas comunidades.