Son días muy complejos para el Gobierno porque se está enfrentando un panorama fiscal muy complejo.
En menos de dos semanas se evidenció el desplome en sus 'ahorros' en el Banco de la República , la Corte Constitucional decidió no darle plazo para cumplir una sentencia que solo este año cuesta 6.7 billones de pesos y para completar el recaudo tributario en abril cayó por debajo de lo esperado.
Todos los analistas coinciden en que hay una sola salida: Cortar los gastos.
¿Cómo llegamos a esto? Las actas del Confis, una instancia interna de Gobierno, dan algunas pistas de cómo se ve la situación desde la cabina del avión.
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El 13 de junio se aprobó el marco fiscal del Gobierno con las metas de recaudo de impuestos de la Dian por 315 billones que ya incluyeron la gestión de las famosas demandas (litigios) por unos 15 billones. No hay constancia de ningún 'pero' a la meta de los litigios en esa reunión por parte de la Dian.
Un mes después, el 14 de julio, el Gobierno cambió las cifras y decidió que era mejor repartir más utilidades de Ecopetrol. Primero pensaron repartir el 82 % de las utilidades como dividendos, pero ese día se decidió que la cifra iba a ser del 95 %.
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Con esa información fue que el Congreso aprobó el presupuesto de este año, del 2024, por más de 502.6 billones de pesos.
Solo hasta febrero de este año el Confis empezó a reconocer que las cosas podrían salir diferentes al plan inicial. En la revisión al plan financiero 2024 reconoció que el recaudo de impuestos podía ser inferior en 25 billones de pesos e incluyó en letra menuda esta advertencia: Hay otros 10 billones de pesos que "son contingentes" a la aprobación de una ley'. En otras palabras, estaban advirtiendo internamente en febrero que esos recursos por litigios podían llegar, pero también podían no llegar.
La situación se veía tan compleja que se aprobó recortar gastos por 16.7 billones de pesos y se pidió un análisis sobre la sostenibilidad del Fomag (que maneja la salud de los maestros).
No hay constancia de que Luis Carlos Reyes , exdirector de la Dian, haya asistido a ninguna de las dos reuniones del Confis donde se definieron las metas de impuestos, pues su nombre no está en las listas de asistentes.
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La revisión al plan financiero en febrero incluyó la posibilidad de que la Corte Constitucional le dijera que no al Gobierno, como en efecto hizo, pero no previó que el recaudo de impuestos iba a caer en esa magnitud, lo que representa un desafío adicional para el Gobierno.
Cálculos de Reuters apuntan a que en cuatro meses el recaudo tributario está 10.9 billones de pesos por debajo de las metas.
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El Gobierno tiene pocas alternativas para subir sus ingresos en este momento. Cualquier reforma tributaria implicaría ingresos adicionales a partir 2026 y solo podría generarlos para 2025 si se aprueban alzas al IVA o si se crean nuevos impuestos directos.
El Gobierno ha coqueteado con la idea de cambiar la regla fiscal, pero tampoco ha presentado un proyecto de ley en esa dirección.
Muy pronto el Confis tendrá que reunirse nuevamente y ahí tendrá que tomar decisiones.