Odín Sánchez, exsecuestrado por el ELN, dijo que el cese bilateral del fuego dijo que es una gran oportunidad para empezar el proceso en las regiones del país.
"Es una oportunidad para que los negociadores tanto del Gobierno como del ELN lleven los diálogos a las poblaciones que viven en el cuarto mundo", dijo.
Insistió que el cese bilateral cae como "anillo al dedo" para las poblaciones que viven confinadas y que requieren abastecerse de alimentos.
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"Pese a todo lo que me pasó con el secuestro hace poco estuve a media hora donde me liberaron y en una reunión con las comunidades que quieren hablar directamente con los subversivos", explicó.
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