Luego del hundimiento de la reforma laboral en la Comisión Séptima del Senado
, el Gobierno nacional lazó como nueva bandera política la realización de una consulta popular que respalde con su voto o no las reformas sociales.
Aunque tanto el Gobierno como el Pacto Histórico ya están abiertamente llamando a respaldar el voto por el sí en la consulta popular, que hasta lo que se ha conocido no serían más de 11 o 12 preguntas una de ellas si se está de acuerdo o no con que la jornada laboral finalice a las 6 de la tarde; debe pasar por un filtro previo que es la Plenaria del Senado que debe emitir concepto favorable tanto a las preguntas como a la justificación de la convocatoria de este mecanismo de participación ciudadana.
Son 13 bancadas en disputa, 105 votos con una mayoría de 54, los que serían necesarios para que el Gobierno avance; sin embargo, ya los 11 senadores de Cambio Radical dijeron que no aprobarán esa convocatoria mediante un comunicado emitido en las últimas horas.
“Interpretando el sentir de millones de colombianos que no participaron en las manifestaciones de hoy, ha decidido no apoyar, en plenaria de Senado, la consulta popular que promueve el Gobierno de Gustavo Petro, por ser esta inconveniente ante la actual situación del país. Asimismo, acordaron presentar ante el Congreso
de la República una nueva iniciativa de reforma laboral”, explicó el partido opositor.
A ellos se podrían sumar la otra bancada de oposición, la del Centro Democrático de 12 senadores, pese a que hace año y medio este partido buscó recoger firmas para una consulta sobre las reformas sociales, pero no logró recoger las firmas. Aunque no hay una decisión de la bancada en este momento, la senadora Paloma Valencia señaló que no tienen miedo a que se lleve a cabo el mecanismo de participación ciudadana.
“Yo creo que nosotros jamás le hemos tenido obstáculo a que los colombianos se pronuncien. Lo que pasa es que deben pronunciarse sobre cosas que tengan algún sentido. No deben pronunciarse sobre cosas que suenan bonito, pero que los llevan a uno a la ruina”, señaló Valencia.
Pero queda la duda sobre qué pasaría con los llamados partidos independientes o los partidos tradicionales que representan cerca de 50 votos. Por ahora, el senador Conservador y Presidente del Congreso, Efraín Cepeda, no ve lío con que se le consulte a la ciudadanía, pero hizo una advertencia al Gobierno.
“Yo creo que esa consulta popular, vamos a esperar las preguntas, pero no solamente no le tenemos miedo, sino creo que el Ejecutivo puede salir debilitado si no se logra la votación de alrededor de 13.600.000 votos, pero a la democracia no le tenemos miedo”, afirmó Cepeda.
El Gobierno ya cuenta con 27 votos del Pacto Histórico, Comunes y las curules indígenas, pero también podría sumar con algunos votos en partidos como los verdes, la ASI (aunque su presidenta Berenice Bedoya fue una de las que votó por el archivo de la reforma laboral); pero el camino podría ser fácil para el Gobierno si el argumento con el que se apela es que los congresistas que se nieguen buscan evitar que se pronuncie el constituyente primario.