Desde que se reabrió la Plaza Minorista, tras 20 días de cierre por un brote de coronavirus que ya se controló, los comerciantes que han retomado sus ventas están preocupados por la disminución de ingresos.
Aseguran los comerciantes que la reducción de hasta el 50% en ventas se debe en gran parte a la desconfianza en los protocolos de bioseguridad por parte de la clientela.
“La Plaza Minorista bajó sus ventas desde que se dijo que no contábamos con las medidas de protección necesarias, pero la verdad es que esta pandemia nos sirvió para fortalecernos como plaza. Hoy todos los comerciantes estamos trabajando juntos con todas las medidas de bioseguridad”, comentó Claudia, una comerciante de legumbre al por mayor en la Minorista.
Hoy en la Plaza, según su gerente Edison Alexander Palacio, cuentan con cabinas de desinfección, toma de temperatura, campañas de lavado de mano constante y distanciamiento social.
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“El control de aforo es fundamental. Antes en un día de alta afluencia entraban hasta 12.000 clientes a la Plaza, hoy recibimos un máximo de 1.500”, comentó el gerente.
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Igualmente, la Minorista trabaja en conjunto con la Universidad de Antioquia en la implementación de un sistema biométrico que permitirá agilizar los controles de entrada a la Plaza.
“Es un sistema biométrico de toma de temperatura en tiempo real, un censo de personas para determinar si es hombre o mujer, qué edad promedio puede tener”, explicó Edison Alexander, quien confirmó que ya se instaló el primer prototipo de este sistema que estará en prueba durante 45 días en la entrada principal de la Minorista.