Avianca apeló la decisión de Aerocivil de oponerse a su unión con Viva Aire en un mismo grupo empresarial y le ofreció al Gobierno varias alternativas para mitigar el impacto de esta megaoperación en la libre competencia.
Aerocivil tiene dos meses para decidir si accede o no a las peticiones de Avianca y si le da luz verde a la operación.
Por ejemplo, Avianca ofrece devolver una parte ‘relevante’ de sus turnos de despegue y aterrizaje en El Dorado de Bogotá “con el objetivo de que otras aerolíneas puedan, si así lo desean, crecer sus operaciones en El Dorado”
También está poniendo sobre la mesa la posibilidad de ofrecer acuerdos de código compartido a la aerolínea estatal Satena y se compromete a no acabar con la marca Viva Air ni con su modelo de negocio de bajo costo.
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Otra de las propuestas de Avianca es que se establezcan protecciones en la tarifa de tres rutas que quedarían bajo el monopolio del nuevo grupo empresarial si se aprueba la transacción.
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“En caso de que la decisión final de las autoridades imposibilite el rescate de Viva y sus consecuentes efectos, Avianca, dentro de la capacidad legal y operativa con la que cuenta actualmente, hará lo posible por atender la demanda y necesidades del país ante la posible desaparición de un competidor”, dijo Avianca en un comunicado.
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