En diálogo con Blu Radio, el director nacional del Gaula de la Policía, el teniente coronel Elver Vicente Alfonso Sanabria, dijo que las disidencias de las Farc son las responsables de la mayoría de los casos de extorsión que se han registrado en el Huila .
El oficial agregó que, en el caso de Neiva, la extorsión en el 2024 se ha disparado en un 30 por ciento en comparación a los casos reportados en el año 2023, siendo el sector comercio el más afectado por este flagelo.
“Un alto porcentaje de la extorsión acá en este departamento, el responsable es el Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc, en el caso de Neiva el año pasado se nos presentaron 12 casos de extorsión, pero debo decirlo de manera muy sincera que en lo que va corrido del 2024 llevamos en Neiva 33 casos de extorsión, pero estamos trabajando para poder contrarrestar este flagelo”, enfatizó el director nacional del Gaula de la Policía.
El teniente coronel añadió que, de los nueve atentados registrados en Neiva en lo corrido del 2024, dos de esos han arrojado resultados positivos con la captura de los presuntos responsables en reacciones oportunas a través de plan candado entre el ejército y la policía.
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Por su parte, los comerciantes de Neiva piden a las autoridades mejores estrategias para frenar el flagelo de la extorsión, ante los recientes atentados que se han registrado en la ciudad contra establecimientos de comercio como concesionarios de motos, entidades financieras entre otros.
“Para hacerle frente a estos delitos de extorsión y atentados, se requiere de más CAI móviles de la policía en sectores estratégicos de la ciudad, lo otro sería un toque de queda incluyendo menores de edad después de las 10 de la noche y controles militares. Yo propongo que haya más seguridad con más presencia de la policía, pero policía cuidando, porque uno los ve en las motos y no tienen comunicación con el comerciante”, expresaron los comerciantes a Blu Radio.
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A propósito, el fin de semana anterior llegaron a Neiva 20 unidades de la Policía especializadas en antisecuestro y antiterrorismo, para aumentar la capacidad de fuerza en la zona metropolitana de la ciudad.
Los nuevos uniformados adelantarán actividades operativas y de prevención, hombres y mujeres entrenados en las últimas técnicas de operaciones urbanas y rurales, entre las que están tiro de precisión, brecheo, combate urbano y combate rural.