Así fue el operativo en el que murieron ocho disidentes de ‘Iván Mordisco’ en Cauca

En el marco de la Operación Mantus, el Ejército Nacional logró un importante golpe contra el Estado Mayor Central de las disidencias de las FARC, lideradas por alias Iván Mordisco . Ocho de sus integrantes murieron y otros siete resultaron heridos en intensos combates que tuvieron lugar en la zona rural del municipio de Timbiquí, en el departamento del Cauca.

El operativo, que se llevó a cabo en una zona estratégica para el narcotráfico en el Cañón del Micay, se dirigió específicamente contra el frente Rafael Aguilera, uno de los brazos armados más activos de las disidencias. Esta estructura criminal ha sido señalada por controlar rutas clave hacia el Pacífico colombiano, utilizadas tanto para el tráfico de drogas como para la minería ilegal.

Detalles del operativo militar

El general Erick Rodríguez, comandante del Comando Conjunto N2 del Ejército, explicó en una entrevista a Mañanas Blu los pormenores de la operación. Según el oficial, la ofensiva comenzó el pasado sábado en la vereda Santa María, a orillas del río Timbiquí.

 “Las tropas lograron neutralizar a tres terroristas de la estructura Rafael Aguilera y rescatar a uno de ellos, que se encontraba herido y fue trasladado a un centro asistencial”, detalló el general Rodríguez. Sin embargo, la operación no terminó ahí. De acuerdo con información de inteligencia, otros cinco combatientes murieron durante los enfrentamientos, aunque sus cuerpos fueron retirados ilegalmente por civiles, posiblemente bajo coacción del grupo criminal. 

“El combate fue muy complejo, dado que se presentó de orilla a orilla del río, lo cual dificultó las labores de consolidación y recuperación de los cuerpos”, añadió Rodríguez. 

El frente Rafael Aguilera, bajo el mando de alias Maecha, ha sido identificado como uno de los principales actores criminales en la región, con un fuerte enfoque en el narcotráfico y la minería ilegal. Según el general Rodríguez, esta estructura “cobra a los mineros ilegales que trabajan en las orillas del río Izcuandé, generando ingresos de hasta 5.000 millones de pesos mensuales solo por la minería, sin contar los dividendos del narcotráfico”.

La presencia de estos grupos ha contribuido a la contaminación de los ríos por mercurio y ha dejado a las poblaciones locales bajo su control. Timbiquí e Izcuandé son municipios completamente aislados, sin vías de comunicación que los conecten con el resto del país, lo que ha permitido a las disidencias fortalecer su dominio en la región.

El Cañón del Micay es una de las áreas de mayor importancia estratégica para las disidencias del Estado Mayor Central. Sus 218 kilómetros de extensión y su proximidad al Pacífico colombiano lo convierten en una ruta vital para el tráfico de drogas. La región está dominada por cultivos de coca y la minería ilegal, actividades que son las principales fuentes de financiación de los grupos armados.

“El reto no solo es golpear militarmente a las estructuras criminales como la de Iván Mordisco, sino también buscar alternativas económicas sostenibles para los más de 30.000 habitantes que viven de estos cultivos o de la minería ilegal”, enfatizó Rodríguez.

El general Rodríguez aseguró que las operaciones militares en la zona continuarán, no solo contra los hombres de Iván Mordisco, sino también contra otros grupos armados que operan en el suroccidente colombiano, como las disidencias de Iván Márquez y el ELN. En la última semana, el Ejército ha logrado importantes avances, incluyendo la captura de tres miembros de la estructura Roberto Ramos en el municipio de Totoró, Cauca.

 “Este golpe contra el frente Rafael Aguilera es un paso más en nuestra ofensiva, pero estamos comprometidos a seguir debilitando estas estructuras hasta que podamos garantizar la seguridad y el bienestar de las comunidades en Cauca”, concluyó Rodríguez.