Francisco Lloreda, presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP) dijo que, si se detiene la exploración de petróleo, según como propone Gustavo Petro , en seis o siete años el país perdería la autosuficiencia y dependería de combustibles importados , lo que le pasaría factura directamente a los colombianos más pobres.
“Los más perjudicados serían los colombianos más pobres, porque se traduciría en un incremento en el precio de la gasolina y el diésel, que terminaría afectando el costo de los pasajes de transporte masivo, intermunicipal de pasajeros, marítimo y aéreo”, dijo a BLU Radio el dirigente gremial.
Según Lloreda, una decisión como esta afectaría a más de 11 millones de hogares en e país, porque el gas natural domiciliario llegaría más costoso y también afectaría alrededor de 3,5 millones de hogares que hoy día reciben y utilizan el Gas Licuado de Propano (GLP), que es un derivado del petróleo.
“Además, afectaría a todos los colombianos y a todos los sectores económicos porque el 25 % de la generación eléctrica del país, en especial las horas pico, se respalda en gas natural. Es decir, todos los colombianos y todos los sectores económicos se verían seriamente afectados”, añadió.
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El panorama respecto a la estabilidad macroeconómica y fiscal de Colombia tampoco es alentador, según el presidente de la ACP, pues esta industria aporta recursos importantes a la Nación y a las regiones a través de impuestos, regalías y dividendos de Ecopetrol, entre otros.
“Es muy difícil reemplazar estos recursos en el corto y mediano plazo. Pero además perjudicaría alrededor de 20 departamentos que hoy en día viven del petróleo y el gas, departamentos cuyo PIB principal se deriva de esta industria. Miles de empleos, miles de servicios que se contratan”, sostuvo.
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En lo corrido del actual Gobierno, destacó Lloreda, este sector ha aportado más de 90 billones de pesos y están proyectados para los próximos cuatro años más de 130 billones de pesos, “equivalente a varias reformas tributarias y el país no aguanta más reformas”.
“Esta industria, junto a otras del sector minero energético, representan más del 40 % de las exportaciones de Colombia ¿Con qué las vamos a sustituir de la noche a la mañana? Esto nos dejaría una crisis y un desbalance de la balanza comercial gigantesco y lo que haría es empobrecer más el país y sus habitantes”, puntualizó el presidente de la ACP.
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