El atacante que disparó este jueves junto al consulado israelí en Múnich y fue abatido por la policía era de nacionalidad austríaca y previamente identificado por las autoridades como islamista, informaron varios medios.
La policía de la capital bávara aún no ha ofrecido información oficial sobre la identidad o los motivos del presunto agresor, quien no causó heridos y, según videos que circulan en redes sociales, disparó con un arma antigua de cañón largo que llevaba una bayoneta acoplada.
Fuentes citadas por el diario austríaco Der Standard y el semanario alemán Der Spiegel señalaron que el atacante tenía 18 años y había llegado al lugar en un vehículo registrado cerca de Salzburgo, Austria.
Ambos medios indicaron que el individuo ya había sido detectado por las autoridades como "islamista", aunque no se especificó si había cometido algún delito o simplemente era sospechoso de tener una ideología extremista.
El primer ministro de Baviera, Markus Söder, declaró que existe una "fuerte sospecha" de que el incidente podría estar relacionado con el consulado israelí. Durante una breve intervención en el lugar de los hechos, expresó alivio porque "todo salió bien" y destacó que la protección de las instalaciones judías es una prioridad máxima.
El consulado israelí en Múnich estaba cerrado este jueves con motivo del aniversario de la toma de rehenes israelíes en los Juegos Olímpicos de 1972, que tuvieron lugar en la misma ciudad.
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El ataque ocurrió cerca del centro de documentación sobre el nacionalsocialismo y, según algunos informes, ciertos disparos se dirigieron contra las garitas de seguridad en la entrada.
Actualmente, un operativo policial sigue en el lugar para recolectar pruebas y entrevistar a testigos del incidente, ocurrido alrededor de las 9:00 horas (7:00 GMT).
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El presidente de Israel, Isaac Herzog, conversó por teléfono con su homólogo alemán, Frank-Walter Steinmeier, tras conocer los hechos. Ambos condenaron el ataque, según informó Herzog en su cuenta de la red social X. "Un terrorista lleno de odio intentó nuevamente asesinar a inocentes en Múnich", afirmó, recordando a los 11 atletas israelíes que murieron hace 52 años y agradeció la "rápida actuación" de los servicios de seguridad alemanes.