Un poderoso escándalo se desató en Estados Unidos tras la suspensión, en últimas horas, de una juez de familia del condado de Kenton, en Kentucky, acusada de ‘conductas impropias’ desde noviembre pasado, la cual incluye un supuesto trío sexual en la sede del juzgado.
Dawn Gentry es acusada de contratar a su novio, un expastor, a quien le permitía predicar y tocar guitarra en la oficina. Empleados anónimos acusan a Gentry de haber sostenido relaciones sexuales al tiempo con su novio y una funcionaria a su cargo en la oficina.
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La juez también es señalada de permitir el consumo de licor en el juzgado; de presionar y despedir a empleados que no apoyaron su candidatura para ser reelegida en el cargo y de permitir que personas ajenas al cuerpo judicial a su cargo tuvieran acceso a procesos judiciales de carácter privado, entre otras acusaciones.
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Gentry, quien ha negado todos los cargos, acaba de ser suspendida sin salario de su cago mientras el cuerpo judicial federal adelanta la investigación y el juicio en su contra.
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