Una aguda polémica sacude a Reino Unido tras la muerte de Ian Trainer, un adulto mayor de 83 años que fue privado de la libertad en su domicilio por escuchar música clásica a alto volumen. De acuerdo con el medio inglés Dailymail, el pensionado falleció el pasado 23 de noviembre. El insólito caso se registró en el condado inglés de Merseyside.
Trainer fue objeto de la acción penal, el año pasado tras ser denunciado por poner la música demasiado alto y entonces se le prohibió superar los 65 decibelios, lo que equivale a una conversación con volumen normal entre las 9:00 de la mañana y las 10:00 de la noche.
Sin embargo, el adulto mayor violó repetidas veces la orden, por lo que se le ordenó la medida privativa de su libertad.
Posterior al fallecimiento, trascendió que Ian Trainer era un gran amante de la música culta y que perdió el sentido auditivo tras sufrir un fuerte resfriado. Por esta razón, no podía usar audífonos.
El caso de octogenario despertó la molestia de colectivos culturales y algunos vecinos.
"Es absolutamente vergonzoso encarcelar a un jubilado por escuchar música alta porque es sordo, que bajen la cabeza avergonzados por esto", opinó uno de los ciudadanos inconformes citado por Dailymail.
La foto del rostro de Ian Trainer, que fue usada para su fichaje ante la justicia, se ha convertido en una imagen viral en todo Reino Unido, pues muestra una gran tristeza y evidencia que el sistema se ensañó en su caso. Muchos aseguran que su único crimen fue tener buen gusto.
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