El Jurado Nacional de Elecciones (JNE) de Perú proclamó este lunes al maestro izquierdista Pedro Castillo como nuevo presidente, seis semanas después del reñido balotaje en que enfrentó a la candidata derechista Keiko Fujimori.
Después de declarar infundados los últimos recursos legales presentados por Fujimori, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) refrendó los resultados de la votación del 6 de junio, donde Castillo obtuvo el 50,12 % de los votos válidos, un estrecho triunfo por apenas 44.263 votos de ventaja sobre Fujimori.
"Proclamo presidente de la república a don José Pedro Castillo Terrones", dijo en una breve ceremonia virtual el titular del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), Jorge Luis Salas, luego de que este órgano terminara de resolver numerosas impugnaciones y apelaciones de Fujimori.
"Ha llegado el momento de llamar a todos los sectores de la sociedad para construir unidos, en este Bicentenario, un Perú inclusivo, un Perú justo, un Perú Libre", celebró el nuevo presidente de Perú en su cuenta de Twitter.
¡Gracias pueblo peruano por este histórico triunfo! Ha llegado el momento de llamar a todos los sectores de la sociedad para construir unidos, en este Bicentenario, un Perú inclusivo, un Perú justo, un Perú Libre. Sin discriminación y por los derechos y todos y todas. (1/2) pic.twitter.com/JmMdT9miaY
— Pedro Castillo Terrones (@PedroCastilloTe) July 20, 2021
Publicidad
¿Quién es Pedro Castillo, el nuevo presidente de Perú?
Pedro Castillo, un profesor de una humilde escuela rural de los Andes, nacido en una de las regiones más pobres de Perú, será el primer presidente de la historia del país que alcanza el poder sin pertenecer a sus élites, nerviosas e inquietas al ver a alguien "extraño" a ellas en la cúspide del Estado.
Publicidad
A estos grupos de poder se les hace extremadamente difícil asumir la llegada al sillón presidencial de Castillo, cuya proclamación oficial se ha dado un mes y medio después de las elecciones, tras los frustrados intentos de la derechista Keiko Fujimori, candidata de las élites, por cambiar los resultados.
Todo sucede casualmente cuando se conmemoran los 200 años de la independencia de Perú, donde la victoria electoral del inesperado nuevo presidente ha sacudido los pilares de una sociedad profundamente conservadora y ha puesto los pelos de punta a la clase alta limeña, acostumbrada a gobernar el país.
Es en estos círculos donde Castillo ha hecho saltar las costuras del clasismo y el racismo, más incluso que cuando fueron electos los expresidentes Alejandro Toledo (2001-2006), que tenía estudios universitarios en Estados Unidos, y Ollanta Humala (2011-2016), capitán del Ejército y agregado militar en Corea del Sur y Francia.
A diferencia de ellos, "el profesor", como le llama su círculo cercano, ha sido un simple y llano maestro de una de las tantas escuelas rurales donde los niños caminan varias horas para llegar a clase y la anemia y la desnutrición están muy presentes, lo que dificulta en gran medida el aprendizaje.
Publicidad
MAESTRO CON "PALABRA"
En el pequeño caserío norteño de Chugur, de donde proviene Castillo, asuntos que tanto preocupan a las élites limeñas como la cotización del dólar o el desempeño de la bolsa de valores son irrelevantes para sus vecinos, más interesados en que llueva para tener una buena cosecha o en que no se enfermen sus animales.
Publicidad
Consciente de que esa realidad es la misma para millones de peruanos de otras zonas, Castillo siempre culmina sus discursos con la frase "palabra de maestro", a sabiendas de la gran valoración que los sectores humildes tienen por los educadores como forma de acceso al conocimiento y salir de la pobreza.
Antes de las elecciones solo se le recordaba en Lima por liderar en 2017 una huelga del magisterio peruano que mantuvo paralizada la enseñanza pública por más de tres meses, en una protesta donde logró encabezar una facción del sindicato integrada también por algunos presuntos miembros del brazo político de Sendero Luminoso.
Cuando a inicios de 2021 aceptó ser el candidato presidencial del partido marxista Perú Libre, por invitación de su líder y fundador Vladimir Cerrón, quien estaba impedido de postular por una condena por corrupción, Castillo difícilmente podría imaginarse que acabaría siendo el ganador de una contienda que tuvo a 18 postulantes.