Una treintena de cohetes fueron disparados hacia el norte de Israel desde Líbano durante la noche, entre el jueves y el viernes, poco después de un ataque israelí contra un "comandante" del Hezbolá libanés, informó el ejército del Estado hebreo.
"Podemos confirmar que hubo alrededor de 30 disparos desde Líbano hacia los sectores de Ein Zeitim y Dalton en el norte de Israel", indicó a la AFP un portavoz del ejército al ser preguntado por los cohetes disparados desde el país vecino durante la noche.
Según las primeras informaciones, estos disparos no dejaron "ningún herido", añadió el portavoz militar.
Una fuente de seguridad libanesa, bajo condición de anonimato, había indicado a la AFP anteriormente que un alto cargo militar de Hezbolá resultó "gravemente herido y una persona que lo acompañaba también resultó herida" en un bombardeo israelí que alcanzó su vehículo en Nabatieh, en el sur de Líbano.
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El objetivo del bombardeo fue un comandante de Hezbolá, movimiento islamista aliado de Hamás, que había estado implicado en varios disparos contra el norte de Israel, cerca de la frontera libanesa, según un portavoz del ejército israelí, que no dio más detalles.
Según la agencia de noticias oficial libanesa Ani, "un dron israelí lanzó un misil alrededor de las 16H15 (14H15 GMT) en la entrada este de Nabatieh contra un automóvil todoterreno que se incendió".
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Hezbolá afirmó haber "atacado la base de control aéreo de Merón con misiles Falaq", en represalia por "el ataque contra la ciudad de Nabatieh".
La guerra entre Israel y Hamás, que estalló por el sangriento ataque del movimiento palestino en territorio israelí del 7 de octubre, agravó las tensiones en otras zonas de Oriente Medio.
Desde entonces, Hezbolá bombardea posiciones del ejército israelí en la frontera en apoyo a Hamás, e Israel responde bombardeando objetivos en el sur de Líbano.
En cuatro meses, 227 personas, en su mayoría combatientes de Hezbolá pero también 27 civiles, entre ellos tres periodistas, han muerto en el sur de Líbano, según un recuento de la AFP.
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En el lado israelí han muerto 15 personas, según el ejército.
Decenas de miles de residentes de ambos lados de la frontera tuvieron que abandonar sus hogares desde que comenzó la violencia.
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