La planta nucler de Zaporiyia (ZNPP), la mayor de Europa, quedó completamente aislada de la red eléctrica tras los ataques rusos de las últimas horas, lo que podría terminar en una emergencia con consecuencias radiactivas para todo el mundo, según la empresa estatal Energoatom.

La central, la tercera mayor del mundo, fue ocupada por el Ejército ruso tras la invasión y ha sufrido varias desconexiones de la red desde entonces.

Por el momento, "la central se encuentra desconectada de la red y se ha implementado un modo de apagón por sexta vez desde su ocupación", advirtió la empresa.

Energoatom informó de que todas las centrales nucleares de Ucrania han reducido su capacidad debido a la amenaza de ataques con misiles.

"En caso de que sea imposible reanudar el suministro de energía exterior a la planta, puede ocurrir una emergencia en este periodo (10 días) con consecuencias de radiación para todo el mundo", añadieron.

La empresa pidió la comunidad internacional hacer todo lo posible para que "las fuerzas de ocupación se retiren” y se puedan retomar las actividades, pues es la única forma de restablecer la seguridad nuclear, radiológica y física de la central.

Y es que los últimos ataques de Rusia han tenido como objetivo las infraestructuras eléctricas, aunque algunos de ellos han impactado en zonas residenciales.

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