Según la ONG Irán Human Rights en lo que va del 2022, Irán ejecutó a más de 500 personas, cifra que se suma las crecientes preocupaciones ante el uso de la pena de muerte por parte de las autoridades de ese país

En las cifras dadas por la ONG se incluyó la muerte de cuatro personas, el pasado 4 de diciembre, acusadas de pertenecer al servicio de inteligencia israelí; sin embargo, se cree que más condenados pudieron morir ahorcados este año

Las cuatro personas fueron sentenciadas a muerte sin el debido proceso y las ejecutaron en la prisión Rajai Shahr en Karaj, cerca de Teherán, donde permanecieron detenidas por siete meses

Uno de los hechos más conocidos, fue el de la ejecución de algunas personas que participaron en las protestas contra el régimen que se llevaron a cabo en el mes de septiembre, según indicó el el director de IHR, Mahmood Amiry-Moghaddam, en un comunicado

Mahmood también señaló que las ejecuciones estaban dirigidas a crear un temor social y “distraer la atención pública de los fallos en la inteligencia de la República Islámica”

Las alarmantes cifras son las más altas registradas en los últimos cinco años. Según los datos, por lo menos 333 personas fueron ejecutadas en 2021, lo que representa un aumento del 25 %, en comparación con el 2020, en el que murieron 267 personas

La ONG dice que 26 personas, incluidos tres menores, enfrentan cargos que podrían llevar a la horca

Las autoridades describieron a los acusados como alborotadores que atacaron a las fuerzas de seguridad y edificios públicos, pero las circunstancias de los casos son cuestionadas por los activistas

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