El 20 de marzo de 2024, seis integrantes del comando de campaña de María Corina Machado entraron en la residencia de la Embajada de Argentina
, en Caracas, buscando protección después de que el régimen de Nicolás Maduro emitiera órdenes de captura acusándolos de traición y conspiración.
Las fuerzas de seguridad cortaron la electricidad, colapsó la planta externa que daba energía. Se denuncia, además, que no dejan entrar alimentos
, medicamentos y les restringen hasta el agua potable, lo que representa una vulneración a sus derechos.
Al respecto habló Juanita Goebertus, directora de la División Américas de Human Rights Watch (HRW). En diálogo con Mañanas Blu con Camila Zuluaga, mencionó que las condiciones que enfrentan estos asilados son “inhumanas”
.
"Es realmente una situación muy preocupante. Desde Human Rights Watch hemos venido haciendo seguimiento a la situación en la que estas personas se encuentran, que claramente han sido perseguidas políticamente por su rol durante la última elección presidencial en la que se cometió abiertamente un fraude electoral
; vienen francamente sometidos a condiciones inhumanas de recorte de luz, de falta de acceso a medicamentos, de recorte de agua, de recorte en el acceso a alimentos”, indicó.
Señaló que están sometidos a “vigilancia exterior” e, incluso, el régimen ha allanado las casas “a su alrededor". Esta situación pone de manifiesto la violación de los espacios diplomáticos y de los derechos de las personas detenidas
, según dijo.
“Estar constantemente sometidos a vigilancia exterior, incluso, como fue de público conocimiento, el régimen ha allanado las casas alrededor de esta Embajada, originalmente argentina, hoy en día bajo custodia de Brasil, lo que ha significado, incluso, personal armado con rifles de asalto alrededor de la Embajada”, añadió.
Goebertus resaltó que la comunidad internacional, incluidos gobiernos en México y Colombia, está activamente involucrada en buscar maneras de ayudar a las víctimas
. Sin embargo, también expresó que el Gobierno argentino ha perdido toda relación oficial con Nicolás Maduro, complicando aún más la situación.
El desafío no se limita a los asilados en la Embajada
, pues se estima que hay más de 1.000 presos políticos en Venezuela. Al respecto, indicó que el régimen ha usado la detención arbitraria como un arma contra los opositores.
"Nosotros seguimos haciendo presión al Gobierno brasileño, que es quien hoy tiene custodia, para que insista y pueda gestionar con el régimen de Nicolás Maduro
los salvoconductos para que puedan salir. Hemos tenido reuniones al más alto nivel con los distintos gobiernos en México, en Colombia, para insistir en que, a través de los canales que sostienen con el Gobierno de Nicolás Maduro, puedan buscar la liberación de estas personas", precisó.
A pesar de la frustración generalizada, Goebertus sostuvo que la resistencia y la presión internacional son claves para generar un cambio. Recordó la historia de Siria y otras naciones, señalando que siempre hay espacio para la esperanza y la lucha por la justicia.
Situación de los deportados a El Salvador
Finalmente, abordó el tema de los venezolanos deportados a El Salvador
, donde se enfrentan a un régimen que restringe sus derechos. Las deportaciones, que se realizan sin el debido proceso legal, han creado una crisis humanitaria.