La lamentable historia se dio a conocer a través de los medios locales de Argentina, cuando la familia denunció que su a antigua mascota Roma se la habían comido
Hace dos años, Mariela y su familia compraron a la mini-pig, Roma, con el fin de tenerla como su mascota y brindarle amor
Sin embargo, con el pasar del tiempo el tamaño de Roma les comenzó a preocupar, pues no tenían espacio suficiente en la casa para seguirla cuidando como se debe
Por eso, la familia se puso en la tarea de buscar un nuevo hogar en donde pudieran seguirla cuidando y brindándole al amor que Mariela y su familia le habían dado hasta el momento
En medio de la búsqueda, dieron con un conocido quien mostró interés en hacerse cargo de ella
Confiados, Mariela y su familia entregaron a Roma al hombre que había demostrado tener el espacio suficiente para continuar con sus cuidados, pero nunca se imaginaron el destino cruel que le esperaba
Según le contó Fernando Pieroni, presidente de la fundación Planeta Vivo, al diario La Nación de Argentina, el hombre en un principio mantuvo contacto con la familia para demostrar que el animal estaba bien cuidado
Pero luego de un tiempo, la cerdita rompió uno de los corrales en los que permanecía y el hombre decidió que no podía cuidarla más
A pesar de que a él se la habían entregado en adopción, el hombre no tuvo el mismo pensamiento y se la entregó a un vecino para que la matara y a cambio le diera un pedazo de su carne
El hecho generó la indignación de todas las personas que tienen a un cerdo como mascota, pues para ellos, estos animales son considerados un miembro más de la familia
Para ver más haga clic en el siguiente botón