El gobernador de Carolina del Sur (EE.UU.), Henry McMaster, ordenó este domingo la evacuación obligatoria a partir de este lunes, de las zonas costeras de este estado ante la posible llegada del huracán Dorian, de categoría 5, la máxima en la escala Saffir Simpson.
Según un comunicado de su oficina, McMaster ha ordenado la evacuación a partir del mediodía del lunes de los residentes de áreas costeras de Carolina del Sur por "su seguridad personal".
La medida afecta a ocho condados del estado, que también pondrá a disposición de los ciudadanos una serie de refugios.
Asimismo, el gobernador ha pedido la evacuación obligatoria de todos los centros de salud de esos ocho condados acreditados ante del Departamento de Sanidad de ese estado.
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Aparte de estas evacuaciones, McMaster ha exigido que todos los colegios y oficinas gubernamentales cierren desde el martes en varias zonas.
Según el boletín de las 17.00 hora local del Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de EE.UU., Dorian, que tocó tierra en Bahamas este domingo, sigue golpeando las islas Ábaco, en el noroeste del archipiélago caribeño, mientras se acerca a la isla de Gran Bahama.
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Vea aquí: Huracán Dorian devastó las Islas Ábaco, Bahamas
El centro meteorológico informó de que Dorian, con sus vientos máximos sostenidos de 185 millas por hora (295 km/h), está produciendo "catastróficas condiciones huracanadas" en las Ábacos y esta noche hará lo mismo en Gran Bahama.
El huracán se "moverá peligrosamente cerca de la costa este de Florida a partir del lunes por la noche y hasta el martes por la noche", señaló el NHC, con sede en Miami, que agregó que esos días se podrán sentir condiciones huracanadas en la costa de Florida central.
Las fuertes lluvias dejarán en el noroeste de Bahamas hasta 24 pulgadas (60 cm) de acumulaciones de agua y en las Carolinas hasta 10 pulgadas (25 cm), mientras que en las islas centrales de Bahamas y la costa atlántica de Florida y Georgia se registrarán hasta unas 4 pulgadas (10 cm), lo que podría provocar riadas en todos los casos.
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Tras dejar atrás este archipiélago, los pronósticos mantienen que antes de llegar al litoral estadounidense el ojo de Dorian virará con dirección noroeste sobre el martes e iniciará un recorrido por la costa de los estados de Georgia, Carolina del Sur y Carolina del Norte, mientras paulatinamente va perdiendo algo de fuerza.