El jefe de la oficina antinarcóticos de Estados Unidos resaltó los esfuerzos de Colombia y Ecuador en la lucha contra las drogas y destacó las medidas tomadas tanto por el presidente Gustavo Petro en Colombia como por Daniel Noboa en Ecuador.
“El presidente Petro no tiene ningún reparo en enfrentarse a los grupos armados que amenazan a su país”, afirmó Rahul Gupta, director de la Oficina de Política para el Control de Drogas de la Casa Blanca en un conversatorio en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS) en Washington.
Aseguró que el Gobierno colombiano está aplicando un “enfoque indirecto” que aborda las causas fundamentales y le quita oxígeno al modelo de negocio. Gupta aseguró que este enfoque ha contado con el pleno respaldo de la Casa Blanca.
“El enfoque que el presidente Petro está adoptando en Colombia es a través del desarrollo económico rural. Un programa de sustitución de cultivos que pude ver, que aborda algunos de los factores subyacentes que han convertido a Colombia en el mayor proveedor de coca del mundo. Y lo está haciendo con el pleno apoyo de Estados Unidos ”, señaló Gupta durante el conversatorio.
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Gupta resaltó también que en Colombia y Ecuador se están viendo enfoques diferentes para la solución de un mismo problema y que mientras “en Colombia, los grupos armados son socios potenciales en la paz”, en Ecuador “son terroristas destinados a ser derrotados”.
El zar antidrogas recordó que las drogas han dejado cicatrices en Colombia y Ecuador “de manera significativa”, por lo que ambos países son excelentes ejemplos de “cómo el tráfico de drogas genera inestabilidad estatal y regional, alimenta la corrupción y compite con el Gobierno para ser el principal influyente en la vida cotidiana y el trabajo de la gente, todos los cuales son los principales contribuyentes al desplazamiento interno de la población y la migración”.
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El ministro de Justicia, Néstor Osuna , señaló que Estados Unidos está reconociendo “los avances y el camino que se está recorriendo” y se puede ver cómo la política de drogas “enfocada en proteger vidas, el medio ambiente y ofrecerle tránsito a la legalidad a aquellos campesinos que no han tenido posibilidades de surgir dentro de la legalidad y golpear fuertemente a las mafias del narcotráfico, comienza a dar buenos resultados”.