En México hay conmoción por el caso de unos jóvenes trabajadores de un "call center" que habían desaparecido desde el pasado mes.
Hace horas, las autoridades en ese país confirmaron que los restos humanos encontrados en al menos 45 bolsas el pasado 31 de mayo en un barranco en Jalisco, corresponden a los ocho jóvenes reportados como desaparecidos entre el 20 y el 22 de mayo.
Las pruebas forenses han concluido con esta trágica noticia que ponen fin a las esperanzas que conservaban los familiares de encontrar a sus seres queridos con vida.
Sin embargo, este caso en particular llamó la atención desde el principio por varias razones.
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Las desapariciones si fueron reportando con el paso de los días cuando todos los desaparecidos eran compañeros de trabajo en un supuesto call center ubicado en el municipio de Zapopan.
La investigación comenzó el pasado 20 de mayo cuando desapareció Carlos Benjamín García, de 31 años. Su madre relató al diario El Heraldo de México que ese día fue la última vez que habló por teléfono con él mientras se disponía a ir a la lavandería.
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Luego se darían los reportes de Itzel Abigail Valladolid, Carlos David, Jesús Alfredo Salazar y Arturo Robles, de 37 y 30 años; Mayra Karina Velázquez, de 29 años; y Jorge Miguel Moreno, de 28.
Ya el 1 de junio, la Fiscalía estatal tuvo conocimiento de la desaparición de Juan Antonio Estrada.
El giro de este caso se dio con una hipótesis que manejan las autoridades de que existe una presunta relación entre el local y actividades ilegales relacionadas con estafas telefónicas a ciudadanos extranjeros de edad avanzada, principalmente para la venta fraudulenta de apartamentos turísticos.
Se sospecha que los beneficios obtenidos por estas actividades ilegales servían como fuente de financiamiento para algún grupo del crimen organizado, especialmente vinculado al cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
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Pero esto no es lo que dicen algunos padres de los jóvenes desaparecidos han negado tener conocimiento sobre estas supuestas actividades ilícitas y han pedido a las autoridades que no estigmaticen a sus hijos.
Según los testimonios de los jóvenes, contado por la BBC, ellos se dedicaban a la venta de paquetes vacacionales a turistas y no estaban involucrados en actividades ilegales.
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Las autoridades continúan investigando este caso, buscando esclarecer los detalles y llevar a los responsables ante la justicia.
Al momento, ninguna autoridad señaló de manera oficial al cartel liderado por el Mencho. El gobernador jalisciense se limitó a decir que este es un asunto "que es evidente involucra a la delincuencia organizada".
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