Un hombre del sur de Florida (EEUU) que hace cuatro años asestó hasta 50 puñaladas a un perro de raza pitbull, el cual murió dos días después como consecuencia de las heridas, fue condenado a 10 años de cárcel.
Brendan Evans, de 35 años y residente de Hollywood, al norte de Miami (Florida), recibió esa pena tras llegar a comienzos de semana a un acuerdo judicial con la Fiscalía por el que se declaró culpable de dos cargos relacionados a abuso de animales y al mismo tiempo se desestimaron otros 15.
El sentenciado, que cuando ocurrieron los hechos se encontraba en libertad condicional por un asalto a un banco en 2015 en Tampa (Florida), se encuentra en prisión desde 2017, después de que el animal fuera descubierto gravemente herido dentro de una maleta abandonada en la calle, en un caso que tuvo repercusión internacional.
En un principio, Evans negó la autoría del ataque a "Ollie", pero expertos de la Policía identificaron el ADN hallado en el maletín con el de Evans, y un posterior registro de su vivienda permitió a los agentes encontrar dos patas de gato y varias ratas mutiladas en el congelador del frigorífico, además de colas y cabezas, y pelos de animal en el horno.
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También encontraron cuchillos cubiertos de sangre seca y un machete de 18 pulgadas de largo, según la Policía.
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Michael Gottlieb, abogado de Evans, señaló en la audiencia que su cliente sufre de un "significativo problema mental" y siente remordimientos por sus actos, los cuales fueron cometidos en respuesta a, dijo, "estímulos externos que le decían que si no cometía este sacrificio su vida estaba en peligro", como recoge el canal local NBC 6.
Gottlieb solicitó en la corte que Evans sea trasladado a la cárcel Moore Haven Prison en Florida, donde cree que podría recibir un adecuado tratamiento para su salud mental