Este lunes, 2 de septiembre, Estados Unidos anunció la incautación de uno de los aviones utilizados por el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela. La aeronave, un Dassault Falcon 900EX, con matrícula T7-ESPRT de San Marino, había llegado a República Dominicana en el mes de marzo para llevar a cabo un mantenimiento de rutina.
Avaluado en cerca de 13 millones de dólares, estaba detenido desde hace varios meses en República Dominicana, país al que desde hace un mes Venezuela decidió suspender los vuelos comerciales.
En la mañana de este lunes, 2 de septiembre, tras una orden de inmovilización de las autoridades estadounidenses, el avión voló desde el Aeropuerto Internacional La Isabela, Dr. Joaquín Balaguea con rumbo a Fort Lauderdale en el estado de Florida.
De acuerdo con la información entregada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, el avión fue comprado por 13 millones de dólares a través de una empresa fantasma. La transacción se habría pactado entre finales de 2022 y principios de 2023.
Publicidad
>>> Lea también: EEUU sobre incautación de avión de Maduro: "Perseguiremos a quienes violen sanciones"
Funcionarios del régimen habrían utilizado una empresa fantasma con sede en el Caribe para ocultar su participación en la compra del avión, que fue vendido por una empresa con sede en el estado de Florida, burlando de esta manera las sanciones impuestas por el Departamento del Tesoro.
Publicidad
Una vez completada la transacción, la aeronave salió de Estados Unidos y fue matriculada en San Marino con el número de cola T7-ESPRT, para luego ser llevada a Venezuela a través de una isla en el Caribe en abril de 2023. De acuerdo con la investigación estadounidense, desde mayo de 2023, el Dassault Falcon ha operado casi exclusivamente en una base militar en Venezuela, y ha sido utilizado por Nicolás Maduro, incluso en visitas a otros países.
El 14 de diciembre de 2023, Nicolás Maduro viajó en este avión a San Vicente y las Granadinas para participar en un encuentro de alto nivel con su homólogo de Guyana, para tratar la escalada de la disputa sobre el territorio del Esequibo.
Llegó al aeropuerto Internacional de Argyle en la isla de San Vicente acompañado por la primera dama Cilia Flores, donde fueron recibidos al bajar del avión por Ralph Gonsalves, primer ministro de San Vicente y las Granadinas.
Seis días después, el 20 de diciembre, el mismo avión regresó a San Vicente y las Granadinas, esta vez a la isla de Canouan, para recoger y llevar a Caracas al colombovenezolano Alex Saab, quien llegó a la isla en un avión estadounidense tras ser liberado por el Gobierno de Joe Biden.
Publicidad
A través de un comunicado emitido este mismo lunes por la Cancillería venezolana, el régimen de Nicolás Maduro anunció que se reservará el derecho de tomar acciones legales para "reparar" el daño causado en lo que denominan un “acto de piratería” por la incautación del avión presidencial.
El canciller de República Dominicana afirmó que el avión estaba en Santo Domingo por labores de mantenimiento y durante este tiempo las autoridades recibieron la orden judicial para "inmovilizar la aeronave”, pero aclaró que ni el Gobierno dominicano ni la Fiscalía participaron en la investigación.
Publicidad