La investigación sobre prácticas desleales y subsidios del Gobierno chino para favorecer a los fabricantes de automóviles nacionales, es considerada no favorable para la Unión Europea, por este motivo la llama “una amenaza de daño económico a la UE”.
Estos aranceles se suman al arancel del 10% que se impone actualmente a los vehículos importados del bloque. El mes pasado, Estados Unidos anunció una medida similar, aumentando los aranceles del 25% al 100% sobre los vehículos eléctricos chinos.
Los aranceles en Europa entrarían en vigor el 4 de julio, pero los fabricantes de automóviles tendrán porcentajes diferentes. BYD, el mayor productor mundial de vehículos eléctricos e híbridos enchufables, pagaría un impuesto del 17,4%, Geely, propietaria de Volvo, Polestar, Lotus y Zeekr, vería un arancel del 20%.
A SAIC, propietaria de MG, se le impondría un impuesto del 38,1%. Estados unidos dice que otros productores de vehículos eléctricos en China, que cooperaron en la investigación (como NIO), estarían sujetos a un arancel del 21%, mientras que aquellos que no cooperaron verían un impuesto del 38,1%.
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Por otra parte, Tesla, que fabrica automóviles eléctricos en su fábrica de Shanghai y exporta a Europa, solicitó recibir su propia tarifa, aunque no ha sido anunciada.
La gran diferencia entre los aranceles implementados por EE.UU. y la UE. es que Estados Unidos no tiene el mismo tipo de exposición a los vehículos eléctricos chinos que Europa. Los fabricantes de automóviles chinos como BYD, Geely, SAIC, NIO, Great Wall Motors y Chery son sólo algunas de las marcas que llevan años vendiendo a clientes europeos.
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Los fabricantes de automóviles chinos se han mantenido alejados de anunciar planes para abrir fábricas en Estados Unidos, pero tienen una gran participación en México, donde planean abrir fábricas.
Otra diferencia es que los fabricantes de automóviles europeos como BMW, Mercedes-Benz y Volkswagen dependen en gran medida del mercado chino, y si el Gobierno chino toma represalias con medidas similares, sus ventas en el mercado automovilístico más grande del mundo podrían verse afectadas.
“Esta decisión de imponer derechos de importación adicionales es el camino equivocado. Los Estados unidos. La Comisión está perjudicando así a las empresas y los intereses europeos”, afirmó Oliver Zipse, director ejecutivo global de BMW.
Volkswagen dijo en una declaración que: "Los derechos compensatorios generalmente no son adecuados para fortalecer la competitividad de la industria automotriz europea a largo plazo; los rechazamos".
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Ola Kallenius, director general de Mercedes-Benz, añadió a la agencia de noticias que “como nación exportadora, lo que no necesitamos son barreras crecientes al comercio. Deberíamos trabajar para desmantelar las barreras comerciales en el espíritu de la Organización Mundial del Comercio”.
Si bien esta medida terminará afectando a los consumidores europeos, también podría tener un impacto en los objetivos de la Unión Europea de prohibir los vehículos con motor de combustión interna para 2035. Dado que los vehículos eléctricos chinos ofrecen actualmente precios más bajos y una autonomía decente, el objetivo del bloque de reducir las emisiones de carbono podría verse negativamente afectado sin la oferta (o demanda) actual de alternativas de vehículos más limpios por parte de empresas locales europeas.