En muchas estaciones de gasolina le ofrecen diferentes opciones de servicios a los clientes para que puedan tener un rendimiento adicional en sus carros.
Los nombrados aditivos, como su mismo nombre lo señalan, son líquidos agregados que pretenden generar un efecto beneficioso en la potencia, funcionamiento, y restablecimiento del motor.
Los aditivos tienen diferentes funciones y son aplicados con diferentes fines, ya que sirven tanto para mejorar la combustión como para lubricar el mecanismo interno del motor.
Es por eso que se pueden clasificar en diferentes categorías según su utilidad.
Publicidad
- Aditivos para limpieza del motor. Su función es ayudar a desprender partículas que se van adhiriendo al motor en su interior. Se aplica con cada cambio de aceite, pero es importante que, si se usan, se apliquen con cierta continuidad, ya que con el paso del tiempo se podrían formar partículas más grandes que al desprenderse podrían afectar al motor.
- Aditivo para reducción de emisiones. Se aplica directamente en la gasolina y busca reducir las partículas que emite el motor. Se recomienda uno de alta calidad para que no afecte el contenido del mismo combustible.
- Aditivos de lubricación. Como su nombre indica, cumple con lubricar los diferentes elementos y piezas internas del motor.
- Aditivos para la combustión. Son aquellos que intentan mejorar el rendimiento de la gasolina en el motor, sin embargo, tiene la contraindicación de reaccionar con algunos elementos del combustible.
Es importante revisar si el aceite que normalmente utiliza en cada uno de los mantenimientos ya cuenta con un aditivo, para no caer en los excesos y agregarle algún elemento innecesario.
No se pierda: ¿Qué hacer si se queda sin frenos?
Publicidad