A inicios de enero de este 2025 se inauguró una carretera que conecta Katmandú, la capital de Nepal, con la región del Everest, lo que transforma la forma de llegar a esta zona histórica. Hasta entonces, la única manera de acceder era mediante un vuelo hasta el aeropuerto Tenzing-Hillary o tras una semana de caminata.
La nueva vía, de 64 kilómetros de longitud, une Katmandú con el pueblo de Surkhe, ubicado cerca de Lukla, conocido como la puerta de entrada al Everest. Esta carretera ha sido excavada entre montañas, permitiendo que vehículos cubran el trayecto en unas 15 horas, en contraste con los días que requería el transporte tradicional mediante yaks y mulas.
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¿Cómo beneficiará esto a Nepal?
La apertura de la carretera no solo facilita el acceso de los turistas, sino que también beneficia a la población local al reducir los costos de transporte de productos básicos. Por ejemplo, una bombona de gas que anteriormente costaba hasta cinco veces más en la región del Everest, ahora será más asequible gracias al transporte por carretera.
Empresarios locales, como Jangmu Sherpa, propietario de un albergue en la zona, anticipan un aumento significativo en el turismo, estimando que el número de visitantes podría pasar de 50.000 a 500.000 anuales en los próximos años.
Sin embargo, Sherpa destacó que este incremento probablemente se deba al turismo local, ya que muchos extranjeros prefieren el viaje aéreo, que dura menos de media hora.
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Cuál es el aeropuerto que funciona
El aeropuerto de Lukla, construido en 1964, seguirá siendo una opción para quienes busquen llegar rápidamente a la región. Este aeródromo, situado a 2.843 metros de altitud, es conocido por su pista corta de 527 metros y su ubicación entre montañas, lo que lo convierte en uno de los más desafiantes del mundo para los pilotos.
A pesar de los beneficios económicos y logísticos que representa la nueva carretera, ambientalistas han manifestado inquietudes sobre el impacto que el aumento del turismo podría tener en el frágil ecosistema del Himalaya. Según el activista Pasang Sherpa, la masificación turística podría conducir a una degradación medioambiental en esta región emblemática.