
La marca francesa Citroën emitió una alerta de seguridad para casi 240.000 propietarios de los modelos C3 y DS3 en la mitad norte de Francia, y les solicitó que no conduzcan sus vehículos debido a un problema identificado en los airbags suministrados por la empresa japonesa Takata.
La advertencia, denominada "stop drive" o "dejar de conducir", fue anunciada por Thierry Koskas, director general de la marca, en declaraciones con el diario Le Parisien.
Esta medida se suma a una llamada previa a revisión para reemplazar los airbags defectuosos en estos vehículos. En un inicio, la campaña abarcaba 247.000 unidades, pero alrededor de 10.000 ya han sido reparadas. Los modelos afectados fueron fabricados entre 2008 y 2013.

¿Por qué Citroën pide dejar de conducir el C3?
El defecto en los airbags de Takata ha sido un problema recurrente en la industria automotriz mundial, lo que ha llevado a la retirada de millones de vehículos por parte de diferentes fabricantes, como este caso reciente de Citröen, y hace tiempo de otros como Toyota, Mazda, BMW, y más.
Publicidad
Se ha determinado que estos dispositivos pueden desplegarse de manera incorrecta, lo que representa un riesgo de lesiones graves o incluso fatales para los ocupantes del vehículo.
Takata, el proveedor japonés de estos componentes, se declaró en quiebra en 2017 tras enfrentar una crisis global por este problema y fue adquirida por la compañía estadounidense Key Safety Systems.

Cuáles son los vehículos afectados
El anuncio de Citroën especifica que la orden de "stop drive" se aplica exclusivamente a la mitad norte de Francia y afecta a los modelos C3 y DS3 con matrícula entre 2008 y 2013. Sin embargo, Koskas aclaró que las unidades vendidas fuera de Francia después de 2013 no están sujetas a esta restricción, ya que no se ha identificado ningún riesgo en ellas.
Pero sí hacen parte del contingente de 869.000 unidades de esos dos modelos fabricados entre 2008 y 2019 que Citroën llamó a revisión en Europa a finales de enero.
Vea también
Publicidad