Los carros eléctricos y los de combustión interna tienen varias diferencias clave en términos de funcionamiento, impacto ambiental, costos de operación y mantenimiento. Estas diferencias hacen que cada tipo de vehículo tenga sus propias ventajas y desventajas y, la elección entre uno u otro dependerá de factores como la disponibilidad de infraestructura de recarga y, en especial, de las necesidades de cada conductor.
1. Fuente de Energía
- Carro eléctrico: para empezar, utiliza una batería eléctrica recargable como fuente de energía y esta, a su vez, alimenta un motor eléctrico para que el vehículo pueda funcionar. Hay un factor que les juega en contra y es el punto de carga, pues no todos las estaciones de servicio cuentan con el sistema. Sin embargo, muchos conductores aseguran que es un cambio que de a poco se está dando.
- Carro de combustión interna: en este caso, utiliza combustibles fósiles como gasolina o diésel para alimentar un motor de combustión interna.
2. Emisiones
- Carro eléctrico: no produce emisiones directas de gases de efecto invernadero mientras está en funcionamiento. Sin embargo, las emisiones pueden estar asociadas a la producción de la electricidad utilizada para cargar las baterías, dependiendo de cómo se genere esa electricidad (renovables vs. fósiles).
- Carro de combustión: produce emisiones de gases de efecto invernadero y otros contaminantes directamente del tubo de escape, lo que suma a la contaminación del aire.
3. Costo de operación
- Carro eléctrico: generalmente tiene menores costos de operación debido a la electricidad más barata en comparación con la gasolina y menores necesidades de mantenimiento (no necesita cambios de aceite, por ejemplo).
- Carro de combustión: tiene mayores costos de operación debido al costo de los combustibles fósiles y al mantenimiento regular (cambios de aceite, filtros, correas, etc.).
4. Mantenimiento
- Carro eléctrico: requiere menos mantenimiento porque tiene menos piezas móviles y no necesita muchos de los servicios que requiere un motor de combustión. Por ejemplo, cambios de aceite, filtros de aire, correas de distribución.
- Carro de combustión: requiere un mantenimiento más frecuente y complejo debido a la mayor cantidad de piezas móviles y la necesidad de gestionar la combustión de combustibles.
5. Autonomía y tiempo de recarga/reabastecimiento
- Carro eléctrico: actualmente, la autonomía suele ser menor en comparación con los vehículos de combustión interna y el tiempo de recarga puede ser considerablemente más largo que llenar un tanque de gasolina.
- Carro de combustión: tiene una mayor autonomía en general y el tiempo para llenar el tanque de combustible es mucho menor comparado con el tiempo de recarga de un vehículo eléctrico.
6. Desempeño
- Carro eléctrico: proporciona torque instantáneo, lo que significa una aceleración más rápida y suave.
- Carro de combustión: la entrega de potencia puede ser menos lineal y la aceleración depende de la gestión del motor y la transmisión.
7. Impacto ambiental
- Carro eléctrico: menor impacto ambiental durante el uso, pero la fabricación de baterías puede tener impactos significativos. Sin embargo, esto puede mitigarse con el reciclaje de baterías y el uso de energías renovables.
- Carro de combustión: mayor impacto ambiental tanto en la producción de combustibles fósiles como en las emisiones directas durante el uso del vehículo.